Parásitos Intestinales en mi Perro – Causas, Síntomas, Tratamiento y Prevención

En el mundo animal es muy común las enfermedades de origen parasitario, estas afectan no solamente a los perros o los gatos como el anquilostomas, también pueden ser transmitidas al ser humano.

Este tipo de padecimiento posee una amplia variedad de vectores que poco a poco van deteriorando las funciones normales del organismo huésped (como se conoce el individuo en el que se encuentra alojado el parásito).

Veamos qué sucede en el cuerpo de tu perro cuando se contagia con algún parásito, así podrás entender ¿Cómo funcionan? ¿Cómo se contagian? ¿Qué sintomatología presentan? y ¿Qué acciones preventivas puedes tomar?

Para evitar que la salud de tu mascota se vea mermada y su vida corra riesgo, así como eludir el contagio en seres humanos.

Causas de los parásitos o lombrices en mi perro

Los parásitos en los perros pueden producirse de muchas maneras, pero por lo general estos aparecen es porque han sido transmitidos principalmente por la madre cuando el perro solía ser un cachorro.

Aunque también existen otras formas como lo son el haber ingerido algo que no haya estado en buen estado en su comida o en su ambiente, algún contacto con otro perro u animal, etc.

Parásitos más frecuentes en los perros

Existen algunos parásitos que son más resaltantes que otros, estos se manifiestan por algún cambio en el hábitat y en base también al clima en el que se encuentran los perros, hacen su aparición estos parásitos como lo pueden ser los piojos, pulgas o garrapatas.

De la misma manera que también existen parásitos internos dentro de nuestros caninos, algunos muchos más peligrosos que otros, por lo mismo y tanto es importante llevar a cabo un control de nuestra mascota en un centro veterinario.

No obstante, de forma clara y general, estos son los parásitos que más podrían frecuentar en los perros:

Áscaris

Mayormente conocido como los gusanos redondos, los áscaris son parásitos que se desarrollan dentro del intestino del animal.

Estos aparecen dentro de nuestro perro ya sea porque ha tenido contacto con materia fecal infectada de áscaris o por medio de la madre en gestión de embarazo o labor de parto.

Estos se nutren del intestino del cachorro y con el tiempo pueden provocar enfermedades en el sistema digestivo como lo puede ser vómito y diarrea.

También algunas veces puede notarse si hay hinchazón en el vientre o si presenta neumonía o tos, es importante acudir al veterinario en estos casos.

Anquilostomas

Muy similares a las Áscaris pero los diferencia tener un gancho en su cuerpo redondo de gusano, los Anquilostomas atacan la zona abdominal e ingieren la sangre del perro.

Además liberan huevos en el torrente digestivo, saliendo en conjunto con las heces del can, una manera de contaminar a perros muy fácilmente.

Sin embargo, los Anquilostomas son peligrosos, sobre todo para los cachorros, ya que pueden causar hemorragias internas que no podría soportar el cachorro aún con una transfusión de sangre.

En perros adultos las hemorragias son más crónicas produciendo caquexia y pérdida de peso.

Pulgas

Estos pequeños insectos son los parásitos que con mayor frecuencia habitan en los perros, así como también en cada uno de los rincones de nuestra casa en forma de larvas y huevos.

Estas cuando están en su fase adulta, saltan al pelaje de nuestro perro y asimismo adentrándose en lo profundo de la piel del canino.

Ya en la capa de la piel del animal, hacen pequeñas lesiones mordiendo la piel para extraer sangre, de esta forma las pulgas se alimentan del perro.

Sino se tratan a tiempo en la mascota pueden provocar irritaciones o alergias en la piel del canino e incluso anemia si hay una cantidad numerosa de pulgas en el perro.

Garrapatas

Estos diminutos animales parientes de los ácaros, también son reconocidos como unos de los parásitos que frecuentan mayormente en perros.

Las Garrapatas residen en la naturaleza y hacen su aparición en la fase de otoño, las garrapatas de manera similar a las pulgas saltan al pelaje del perro adentrándose poco a poco a su piel.

No obstante, las garrapatas pueden ser un problema mayor para los caninos, ya que estas además de perforar la piel y extraer la sangre del can.

También son portadoras de enfermedades como lo pueden ser la Babesiosis, Ehrlichiosis o la enfermedad de Lyme, bacterias que se encargan de descomponer el sistema inmunológico del perro.

Tricúridos

Los tricúridos o gusanos látigos por su apariencia, son parásitos internos que se establecen en el medio del intestino delgado y grueso, alimentándose de la sangre.

Si la cantidad de tricúridos llegase a ser suficiente serían capaces de causar diarreas sanguinolentas, llegando a descomponerse el estado de salud del animal y peligrando su plazo de vida.

Dirofilaria immitis

Más famosos como los gusanos del corazón, estos gusanos son transmitidos a través de los mosquitos en zonas del mundo como lo son Europa del Este y del Sur, luego cuando se han desarrollado, se adentran en el corazón y pulmones del perro.

Llegando a medir incluso más de 30 cm de largo, los gusanos del corazón son parásitos expertos en afectar el torrente sanguíneo del organismo entero del animal, también son capaces de provocar una insuficiencia cardíaca.

Los síntomas se pueden notar si el perro presenta enfermedades cardíacas o pulmonares, debe tratarse a tiempo o sino la vida del can podría estar en riesgo.

¿Mi perro me puede contagiar los parásitos? ¿Cómo lo evito?

En efecto algunos parásitos que pueden contener nuestras mascotas pueden tener repercusiones en nosotros, estos casos son conocidos como zoonosis, muchas bacterias o enfermedades que pueden contagiarnos son la Enfermedad de Lyme, Hidatidosis, Toxoplasmosis, Sarna, etc.

Para evitar estos contagios los consejos que podemos tomar en cuenta e implementar son la higiene en cada rincón del hogar, desinfectarnos con uso del jabón luego de haber tocado a nuestro perro, desparasitar al perro según recomiende el veterinario, etc.

¿Qué hago si mi perro tiene parásitos?

En el caso de que el perro presente parásitos, es importante que lo antes posible tenga una visita al veterinario, ya que esta especializado para tratar todo tipo de casos con respecto al cuidado de los animales.

El recomendará un desparasitante adecuado además de una limpieza de hogar para evitar futuros contagios con otros parásitos.

¿Cómo actúan y cómo se transmiten los parásitos a tu perro?

El parasitismo es la manera en la que interactúan dos especies biológicas en la que una (el parásito) se beneficia de otra (huésped) para su subsistencia.

Dada la gran variedad de parásitos, estos se pueden alojar en diferentes partes de los organismos de los huéspedes, hay parásitos que afectan el cerebro de algunos mamíferos como la trichinella spiralis, otros al sistema cardíaco como la filaria canina y quizás los más comunes, los que afectan al sistema gastro-intestinal.

Tu perro se puede contagiar de múltiples maneras, las más comunes son las vías cutáneas u oral.

Muchos de los parásitos pueden penetrar la piel y de allí pasar al torrente sanguíneo, o que ingiera algo contaminado como alimentos o agua. Recuerda que muchos parásitos pueden resistir un tiempo elevado sobre determinadas superficies. Y de allí pasar a tu mascota.

¿Cuáles son los síntomas que presenta mi perro al tener parásitos intestinales?

Como el parásito se encuentra afectando el sistema que procesa el alimento, los síntomas estarán ligados a la alimentación y a la excreta de los mismos ya procesados.

Así que si observas estos síntomas es probable que tu perro sea huésped de algún microorganismo parasitario:

La pérdida del apetito siempre es un síntoma que nos indica algún tipo de padecimiento de tu mascota, un perro sano y saludable ingiere una cantidad de alimentos acorde a su contextura y probablemente desee reponer toda la energía gastada jugando, corriendo o con cualquier otra actividad así que si tu perro deja de comer es necesario que aumentes la vigilancia por si observas algún otro síntoma.

Si tu perro se alimenta adecuadamente, pero notas que empieza a perder peso sin explicación aparente es probable que te encuentres ante un cuadro de parásitos.

Otro síntoma tiene que ver con el proceso digestivo, por lo tanto si notas diarrea en tu perro, es indicio que el sistema digestivo no se encuentra en óptimas condiciones, si observar que estas deposiciones presentan puntos blancos estamos sin dudas ante una patología parasitaria.

Si también notas que hay presencia de sangre en las excretas del animal deberás buscar ayuda a la brevedad posible; ya que el cuadro clínico comienza a ser mucho más serio.

Si adicionalmente tu mascota comienza a desarrollar cuadros febriles; es un indicio de que la afección se está agravando más y que tu perro necesita ser tratado rápida y adecuadamente.

¿Cómo puedo desparasitar a mi perro?

Lo primero que tenemos que recomendarte es acudir trimestralmente al médico veterinario conjuntamente con tu perro para que realice una desparasitación de rutina; la cual procederá a realizar luego de evaluar físicamente a la mascota, acompañado posiblemente por un coproanálisis para detectar el tipo de parásito.

De esta manera el médico suministrará el fármaco correspondiente dependiendo de sus observaciones y los resultados del laboratorio.

La higiene es fundamental como medida profiláctica en contra de los parásitos. Evita que tu perro se acerque a deposiciones de otros individuos.

Es importante que ante cualquier sospecha de presencia de parásitos acudas a tu veterinario y no auto mediques a tu mascota, con esta acción lo que puedes conseguir es agravar el cuadro clínico de tu perro, hacer que los parásitos desarrollen inmunidad a un tipo determinado de medicamentos o intoxicar a tu mascota.

Así que al menor indicio de una enfermedad de este tipo acude a un profesional, el cual está capacitado para prestarte la mayor colaboración posible.

Consejos de prevención para que mi perro no tenga parásitos nunca

Para que nuestro perro no se vea inmerso ante una posible infección de parásitos, es importante que su cuidado sea impecable.

Para esto, la higiene juega un papel fundamental, el ambiente en donde nuestra mascota reside debe estar limpio y cuidado.

En los paseos constantes con nuestro perro evitemos que él tenga contacto con superficies sucias.

De igual manera debemos estar pendiente de que contactos tiene con otro perro o animal, por ultimo pero no menos importante, cada cierto tiempo podemos hacer un uso de desparasitante según el veterinario lo recomiende.