Cómo saber si un pez está enfermo – Síntomas, enfermedades y tratamientos
Todos deseamos que los peces de nuestras peceras se mantengan sanos. Por desgracia, al igual que los humanos, son vulnerables a enfermarse en numerosas oportunidades ante condiciones desfavorables. Ahora bien, los peces con patologías pueden manifestar una serie de signos. Si detecta que su pez mascota padece cualquier síntoma inusual de enfermedad, acuda a un veterinario de confianza que le asesore.
¿Cuáles son los síntomas más frecuentes de un pez enfermo?
Los peces que adquirieron enfermedades pueden mostrar diversos signos y síntomas, de hecho, las anomalías en el cuerpo y el comportamiento que adopten son pistas sobre el tipo de infección, bacteria o riesgo de muerte. Los peces de manera habitual suelen ser activos, por lo que conductas como flotar, hundirse y esconderse suelen ser signos perceptibles de que un pez se encuentre enfermo. A continuación se explican con más detalle:
Desprende escamas
Si piensas que es normal que los peces por el trascurrir del desarrollo y crecimiento, muden o desprendan sus escamas, estas manteniendo un concepto erróneo, porque los peces en condiciones saludables no hacen tal acción ya que estas vendrían siendo su capa de piel. Por lo que si ves un aumento o protuberancia extensa de las escamas y luego el desprendimiento de las mismas deberá considerar ciertos factores.
Algunos de los factores por los cuales puedan perder sus escamas son por daño físico, comportamiento agresivo por parte de otros peces, esto ocurre cuando se incluyen a la pecera comunitarias peces incompatibles entre ellos, o también cabe la posibilidad que los objetos decorativos de la pecera sean muy rústicos y tengan puntas afiladas.
Asimismo, esto puede ocurrir por infecciones y abrasiones, o directamente por la enfermedad de desprendimiento de escamas causada por bacterias, que si no se trata con prontitud podría resultar mortal.
Nada solo en el fondo de la pecera
Un pez que se encuentre en el fondo de la pecera puede estar perfectamente sano ya que existen muchas especies domesticas que pasan tiempo en el inferior de su entorno, por lo que siempre es recomendable tener una pecera con mayor longitud de ancho que de alto, es decir, que sea extensa horizontalmente.
Además, de igual forma, se encuentran los peces que suelen alimentarse en el fondo, mejor conocidos como peces filtradores, engullendo los trozos de comida hundidos o desechos de los mismos. Del mismo modo están los que duermen en el fondo de la pecera porque de esta forma se sienten más seguros.
Aun así, si el pez parece desorientado, nada al revés o se hunde en el fondo de la pecera, significa que está al final de su vida. Por su puesto, esto debe acompañarse de otros signos como la pérdida de apetito, donde a veces deja de comer durante más de dos días.
Este signo se caracteriza por factores de estrés, que puede observarse cuando se introducen nuevos peces en la pecera, aunado al hacinamiento o las condiciones ambientales inadecuadas.
Manchas en su cuerpo
Las lesiones, manchas e hinchazones en el cuerpo del pez señalan infecciones parasitarias o irritación química ya que naturalmente el parásito causa daños en los tejidos, provocando infecciones bacterianas y fúngicas. Las heridas en la piel pueden ser consecuencia de infecciones bacterianas o de la mordedura de otro pez. Las rayas rojas en el cuerpo y las branquias rojas e hinchadas indican malos parámetros del agua.
Se frota con objetos
Otro comportamiento inusual es rascarse contra los objetos de la pecera debido a infecciones cutáneas como invasiones de parásitos o piojos. Esto es un factor más común en los peces de exterior o salvajes, que fueron trasladados a acuarios de interior.
La picazón es una enfermedad causada por el parásito Ichthyophthirius multifiliis, de hecho, esta enfermedad se caracteriza por la aparición de manchas blancas que resultan incómodas para su pez, lo que hace que se tumbe en el fondo de la pecera e intente frotarse contra la grava, las rocas y otros elementos de la pecera.
Boquea en la superficie
Si observa a sus peces jadeando en la superficie de la pecera, la acción inmediata es necesaria. Ellos no están intentando saludar, sino que indican que están en estado de supervivencia. La única razón por la que están en la superficie intentando respirar es la falta de oxígeno disuelto en el agua.
No es normal ver es un pez que pase mucho tiempo cerca de la superficie del agua, quizá jadeando y en aparente estado de angustia. Es posible que no estén recibiendo suficiente oxígeno ya sea debido a un problema en sus branquias, las aletas de las branquias, parásitos o lesiones.
No obstante, si advierte que varios peces se esfuerzan por respirar en la superficie del acuario o permanecen en la parte superior de la pecera, es muy probable que algo vaya desencaminado en las condiciones de su hábitat.
¿Qué debo hacer si mi pez está enfermo?
Si observa que su pez mascota presenta algún signo de enfermedad inusual, póngase de manera inmediata en contacto con su veterinario para que le asesore.
Diagnóstico
Existe una gran diversidad de enfermedades que pueden afectar a los peces, entre las que se distinguen las enfermedades parasitarias e infecciosas como los gusanos del ancla, los puntos negros, la ictericia, el oodinium, los parásitos externos y la planaria, todas estas pueden perjudicar gravemente a los peces y a sus compañeros de pecera.
Los gusanos de ancla son unos gusanos de color verde blanquecino y rojo que existen en las heridas y en la piel de los peces. La picazón es extremadamente mortal y se manifiesta en pequeños granos blancos en la piel y las aletas. Es habitual que en este tipo de enfermedades aparezcan las molestas llagas en la piel o el desprendimiento de las escamas, por lo que es necesario examinar el tejido que lo rodea y las escamas.
Los piojos son otra enfermedad que molesta a los peces y les provoca irritaciones en la piel puesto que son portadores de bacterias y virus e infectan a los peces sanos, estos se distinguen fácilmente en la piel de los peces como puntos planos, oscuros y ovalados. Si nota que el pez empieza a frotarse contra el cristal de la pecera y aparecen manchas rojas en la piel, los síntomas lo van a llevar a una invasión de piojos.
En igual situación, también puede ocurrir que los síntomas presenciados sean producto de problemas con la calidad del agua, como la temperatura, el amoníaco, el nitrito, el nitrato, la dureza, la oxigenación, los niveles de salinidad o los niveles de pH.
O en otro caso, que exista sobrepoblación, donde demasiados peces que, por su puesto, están contaminando el agua y anden en constante competencia por el mismo suministro de aire, puede provocar en consecuencia, niveles bajos de oxígeno.
Tratamiento
A la hora de identificar que su pez está enfermo lo primero que se debe hacer es actuar con rapidez, porque hay antibióticos y tratamientos prescritos muy conocidos, pero una vez que el pez está infectado es complicado curarlo. En la mayoría de los casos, los peces mueren si no se les trata a tiempo o en absoluto. Por lo tanto, en el momento en que el pez se infecta, lo fundamental es actuar con rapidez y ponerlo en cuarentena.
En el dado caso que tenga una pecera comunitaria, también es necesario controlar a los demás peces y, según el tipo de enfermedad, llevar a cabo una limpieza a fondo, cambiando el agua, eliminando físicamente el parásito, limpiar las heridas con un antiséptico como el yodo y sometiendo la pecera a un tratamiento para evitar que otros peces se infecten. Ya que a menudo, casi todos los peces se infectan, es necesario tratar todo el acuario con remedios, si los dispone.
Del mismo modo se puede recurrir a remedios caseros que incluyen productos químicos y/o sal que pueden resultar eficaces, pero consulte primero a un profesional.
¿Cómo puedo prevenir una enfermedad en mi pez?
En términos generales, los peces son susceptibles a las enfermedades como cualquier otra mascota o ser humano, y cuando se trata de enfermedades, la palabra clave es la prevención. Por ello, debe recordar actuar como tal cual detective cuando se trata de la salud y el bienestar de sus peces mascotas.
Lo más idóneo y aconsejable es mantener siempre los parámetros y calidad del agua donde se indica conveniente, igualmente con la temperatura, el pH y la dureza del agua, cuidar el ciclado, con bajos niveles de nitritos y una buena aireación, revisar los peces cada corto periodo de tiempo, asegurando de esta forma el chequeo minucioso de su cuerpo, ojos, aletas y boca, que se encuentren intactos y sin problemas.
Además hay que tener en cuenta, otros factores, como lo son los factores de estrés ya que su sistema inmunitario se debilita y se vuelven proclives a las enfermedades, alimentación adecuada conociendo de antemano las necesidades dietéticas de cada uno, y por último, la actividad del pez. Siguiendo estas indicaciones, tanto usted como su pecera o acuario tendrán una vida plena y saludable, extendiendo la longevidad de los mismos.