¿Cuáles son los cuidados básicos de una tortuga rusa al tenerla en casa?

Si estás considerando tener tu primera tortuga como mascota, hay ciertas consideraciones que debes tener en cuenta antes. Muchas personas creen que mantener a una tortuga es fácil, cuando en realidad requieren de cuidados específicos para que tengan una vida larga y saludable. En esta ocasión te explicaremos cuáles son los cuidados básicos de una tortuga rusa, también conocida como tortuga Horsfieldii, para que puedas tener la tuya propia.

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¿Qué características debe de cumplir el hábitat de tu tortuga rusa?

Antes de considerar tener una tortuga rusa como mascota, debes tener en cuenta dónde vives, si en el piso de un apartamento o en una casa con patio. Lo recomendable es que la tengas en un hábitat en el exterior, y si no cuentas con patio, tendrás que hacerle un terrario.

Los ejemplares machos suelen ser más pequeños que las hembras, alcanzando hasta 20 centímetros mientras que las hembras hasta 25 centímetros. Así mismo, aunque se crea que las tortugas son lentas, les gusta moverse mucho a lo largo del día. Es por ello que si la vas a tener en un terrario, sea lo suficientemente grande para que se pueda mover.

Lo recomendable es que el terrario tenga unas dimensiones de 120×80 cm cuando este en la etapa bebé y adulto joven. Después lo mejor es expandir su alcance, considerando que necesitan tierra para excavar, un gradiente de temperatura donde puedan decidir cuándo tomar frío o calor y un poco de humedad, ya que pueden sufrir de resequedad.

¿Cómo suele ser el temperamento de las tortugas rusas como mascotas?

Lo atractivo de la tortuga rusa es que son animales inteligentes, más de lo que se podría pensar, por lo que pueden reconocer a sus tutores. Interactuar con ellas es importante para que se sientan seguras y queridas, mejorando su calidad de vida.

Si se les deja en libertad en un área grande, investigarán todos los rincones hasta esconderse en un espacio. Este comportamiento es normal, siendo unos animales tranquilos y movedizos cuando ven a sus dueños. No se recomienda manipularlas mucho porque esto puede estresarlas, lo mejor es acariciarlas y dejarlas en el piso, sin levantarlas.

Mientras más pequeña se tenga a la tortuga, más cariño le tendrá al tutor que lo alimenta, acercándose al mismo para que la alimente. Es importante que conozcas muy bien las características de las tortugas de Horsfield y cómo cuidarlas de manera que tengan una buena vida.

¿Cuál es la manera en la que debes de alimentar a tu tortuga rusa?

Muchas personas creen que alimentar a una tortuga rusa es sencillo, cayendo en el error de no darles una dieta variada y rica en vitaminas.

Tipo de comida

A la tortuga rusa le gusta el pastoreo, comiendo muchos dientes de león y hierbas malas. Lo mejor es ofrecerle una dieta donde el 70% u 80% sean flores, hojas y dientes de león. El otro porcentaje se puede completar con fruta, pero no mucha y no tan seguido, ya que esta le puede caer mal y causarle una enfermedad.

Porciones adecuadas

No se debe sobrealimentar a las tortugas rusas, ya que pueden sufrir de parásitos e inflamaciones. Lo recomendable es darle pequeñas porciones a lo largo del día, asegurándote de que se la coma toda, siempre basándose en una dieta herbívora principalmente de plantas y hojas.

Frecuencia de alimento

Se les debe alimentar al menos dos veces al día, permitiendo que se muevan a buscar alimento en la tierra, ya que también suelen comer ciertos insectos. Pero la frecuencia de alimentación debe ir disminuyendo a medida que se hacen más grandes, aumentando la cantidad de comida en cada ocasión. Debes investigar bien cómo alimentar a una tortuga, de modo que no le des alimentos prohibidos que puedan causarle una enfermedad.

¿Qué enfermedades suelen ser frecuentes en este tipo de tortugas y cómo evitarlas?

Por lo general, las tortugas rusas suelen sufrir de enfermedades tales como: infecciones, enfermedades respiratorias, fracturas de caparazón, deficiencia de vitamina A o hipovitaminosis, piramidismo, entre otras.

Los síntomas de estas enfermedades suelen ser: secreción nasal, pérdida del apetito, respirar a través de la boca, ojos hinchados, crecimiento excesivo del caparazón, fisuras en el caparazón, entre otros.

Para evitar estas enfermedades y mantener a tu tortuga rusa saludable, te recomendamos los siguientes cuidados preventivos de manera que no sufra a lo largo de su vida:

• Mantén la temperatura de su terrario variada.
• Dale una alimentación variada y rica en fibra, evitando las proteínas.
• No la sobrealimentes.
• Mantenla hidratada. Colócale un estanque donde se pueda humedecer.
• Cambia su agua regularmente.
• Deja que tome sol por lo menos unas horas al día. Esto fortalece su caparazón.
• Revísala constantemente para encontrar heridas, y en ese caso, desinféctalas con agua y un jabón neutro, para luego aplicar una solución de yodo.

En el peor de los casos, si detectas un síntoma de enfermedad en tu tortuga y a los días no mejora, lo mejor es llevarla directamente al veterinario.