¿Cuáles son las diferencias entre una rana y un sapo? – Características del anfibio

Los sapos y las ranas son anfibios que pertenecen a la familia de los anuros, tienen una forma redonda ancha y sin colas por lo que muchas personas piensan que ambos son el mismo animal. Pero no te confundas, que estos dos son especies distintas que suelen tener varias diferencias bien marcadas, entre ellas su piel y su afinidad por el agua, si quieres saber todas las diferencias entre los sapos y las ranas acompáñanos y descubre todo lo que necesitas para distinguir un anfibio de otro.

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¿Qué características físicas diferencian a las ranas y los sapos?

Aunque los sapos y las ranas son anfibios que suelen confundirse, en realidad ambos tienen bastantes diferencias en cuanto a sus características físicas, por lo que reconocerlo servirá para saber cuando el animal es un sapo o una rana.

Su tipo de piel y el color de la misma

Para lograr distinguir un sapo de una rana, lo primero que debes observar es el tipo de piel, ya que en el caso de los sapos tiene una piel áspera con grumos, mientras que las ranas son totalmente lisas, húmedas e incluso suele tener una apariencia suave.

En cuanto al color los sapos tienden a tener una tonalidad bastante uniforme con predominio al color marrón, verde o grisáceos, ten en cuenta que estos pueden vivir en jardines y camuflarse muy bien, por lo que debes estar atento para evitar que tus mascotas puedan morder a un sapo.

Por otro lado, las ranas distan de los sapos por los colores, ya que estas tienen por lo general muchas tonalidades y casi todos son coloridas, siendo destacable conseguirlas en, amarillo, verde claro, azul, negro y rojas entre otros.

La forma del cuerpo

La forma del cuerpo de ambos espécimen es muy similar, ya que son redondos y sin cola. No obstante, si comparas ambos animales notaras a simple vista que la estructura del cuerpo es diferente, debido a que los sapos se ven musculosos, en cambio, las ranas son mucho más delgadas.

Sus extremidades y cómo ponen huevos

En cuanto las extremidades también tiene una diferencia que vale la pena destacar, ya que las ranas tiene unas patas más largar y delgadas que facilita que las mismas puedan saltar. En cambio, los sapos poseen unas extremidades cortas, debido a que están diseñadas para caminar más que saltar por ello suelen ser vistas en tierra.

Si hablamos del proceso de reproducción, en las ranas comienza con un canto por parte del macho en solicitud de apareamiento, la hembra responderá iniciando el proceso de freza de los huevos que terminará en la fertilización del macho sobre los huevos.

Por su lado los sapos suelen agruparse en la época de reproducción en grandes estanques donde la hembra expulsa los huevos para que los machos fertilicen a las crías. En cuanto las diferencia, las más notables son que los huevos de las ranas permanecen en racimos, mientras que los sapos en línea recta.

Cabe destacar que ni el macho ni la hembra de los anfibios tienen pene ni vagina por lo que la reproducción se lleva a cabo liberando las células sexuales mediante las cloacas de estos animales.

Cómo se desplazan

La gran mayoría de personas piensan que tanto las ranas como los sapos se desplazan mediante largos saltos, pero esto no es verdad, ya que por la estructura de sus patas solo las ranas tienen la capacidad de saltar, en cambio, los sapos son animales más terrestres por lo que su manera de moverse es caminando.

¿Dónde suelen vivir los sapos y las ranas?

Esta pregunta es fácil de responder si analizamos la estructura física de estos animales, ya que ambas especies prefieren las zonas húmedas para vivir y esto se debe a que es más abundante el alimento de estos anfibios en hábitat donde exista mucha agua. No obstante, debes entender que las ranas prefieren vivir dentro del agua, y esto se debe a que su piel suele secarse cuando pasa mucho tiempo fuera de esta, mientras que los sapos son animales que suelen estar cómodos en la tierra, aunque también requieren de un poco de humedad.

¿Qué otras diferencias hay entre estos dos anfibios?

Las diferencias más destacables entre ambas especies las mencionamos anteriormente, ya que recuerda que al tratarse de anfibios tienen muchas cosas en común. Sin embargo, una de las características que no abordamos es el riesgo de envenenamiento para las mascotas domésticas en caso de estar expuestas ante la presencia de estos animales, aunque no todos los anfibios tienen glándulas venenosas, los parásitos y bacterias pueden poner en riesgo la salud de los perros y gatos.