¿Cómo evitar que una perra en celo sea agresiva? – Principales causas
Los perros al igual que cualquier otra especie de animales e incluso los humanos, tienen momentos de agresividad detonados por ciertos factores fuera de nuestro alcance, lo cual quiere decir que sin importar la educación de un canino a veces es imposible prevenir los momentos de agresividad en ellos. Lo mejor que podemos hacer en dichas situaciones, es analizar por qué los perros pueden ser agresivos y qué cuidados hay que tener para evitar salir lastimado.
Las perras suelen mostrarse agresivas cuando se encuentran en celo acompañado de otros comportamientos inusuales, que demuestran hacia otros perros y personas, siendo algo que no sucede siempre puesto que en otras ocasiones la perra tiene un comportamiento más cariñoso de lo habitual. Sin embargo, es importante comprender este comportamiento y saber cómo evitar que una perra en celo sea agresiva.
¿Qué causa la agresividad en las perras que están en celo?
El celo en una perra es un proceso natural que provoca muchos cambios en su comportamiento debido a los altibajos del nivel hormonal que sufre tu mascota, los cuales la afectan tanto en lo físico como en lo emocional.
Aunque puede parecer un comportamiento extraño cuando la perra se torna agresiva de un momento a otro, es importante tomar en cuenta que el ambiente donde se encuentra tiene una gran influencia sobre ello, así como su capacidad de socialización.
Para entender mejor las causas de la agresividad en las perras que están en celo, es necesario conocer las cuatro fases que conforman el celo y los cambios que cada una producen en el comportamiento. Dichas fases son las siguientes.
Proestro: Esta primera fase del celo no es fácil de detectar debido a que el sangrado es mínimo, aunque la perra comienza lamer su zona genital de forma frecuente porque la vulva comienza a presentar inflamación. Durante esta fase, la perra no es fértil pero ya comienza a segregar feromonas que atraen a otros perros, lo cuales esta rechaza de forma natural o mostrando agresividad.
Estro: Durante esta fase del celo la perra se encuentra fértil, por lo que comienza a aceptar a los perros que se acerquen a ella, aunque seguirá mostrando periodos de poca obediencia acompañados de actitudes violentas. Durante esta etapa debes tener cuidado de un embarazo no deseado, por lo que debes aprender cómo ahuyentar a un perro si la perra está en celo.
Diestro: En caso que la perra haya sido fecundada de forma exitosa durante la fase previa, esta ingresa en la etapa de gestación, la cual también puede producirse si la perra sufre de un embarazo psicológico. Los cambios de comportamiento son más frecuentes durante esta etapa, donde la perra puede mostrarse agresiva ante otras personas y perros que intenten montarla.
Anestro: Esta es la última etapa del celo en una perra y se refiere al periodo de descanso e inactividad sexual, en el cual sus niveles hormonales comienzan a estabilizarse y la perra entonces deja de sufrir cambios de conducta repentinos.
¿De qué manera se puede evitar que una perra sea agresiva durante el celo?
Es un proceso complicado evitar que una perra sea agresiva durante el celo, puesto que en dichos casos todo el adiestramiento realizado se vuelve inútil, ya que esto forma parte del marcador genético de la perra y es imposible controlar dichos impulsos. Sin embargo, es posible tomar ciertas medidas de precaución para controlar a los perros agresivos y prevenir que tu mascota se haga daño o cause daño a otros.
A continuación nombraremos las medidas preventivas a seguir para evitar que una perra sea agresiva durante el celo, las cuales son opciones menos invasivas que una posible esterilización.
Con los humanos
Primero que nada, debes crear un espacio dentro de la casa que funcione como una especie de nido para la perra, donde ella pueda refugiarse sin que nadie la moleste cuando se encuentre en momentos agresivos, dicho espacio debe ser en un lugar tranquilo que la perra pueda estar atenta de todos los ángulos que la rodean.
En adición a ello, durante esta etapa de celo debes ser paciente y evitar caer en la frustración con respecto al comportamiento de tu mascota, puesto que dicha actitud es provocado por el cambio hormonal que se encuentra fuera del control de tu perra. Los castigos y regaños a la perra cuando se encuentra en celo no funcionan, puesto que sólo provocarás que sus niveles de ansiedad y estrés sigan subiendo y por lo tanto, siga mostrando comportamientos agresivos.
Si el comportamiento agresivo de tu perra sigue empeorando, es recomendado acudir a un especialista animal o un etólogo canino que pueda ayudarte a resolver estos problemas de conducta, para así prevenir que se vuelvan un comportamiento habitual en tu mascota.
Con otros perros
La opción más sencilla para evitar que tu perra tenga encuentros agresivos con otros perros, es dejar de acudir a lugares donde se encuentren frecuentando otros perros en los paseos diarios, especialmente si dichos perros no se encuentran castrados. Las feromonas que segrega una perra en celo son fuertes y casi imposibles de resistir para un macho, provocando que ocurran conflictos entre ellos.
Puedes salir con tu mascota a dichos lugares donde se encuentren otros perros, pero debes estar atento ante cualquier posible señal de agresividad para alejarte con tu mascota lo más rápido posible. Es decir, en caso que comiencen a haber gruñidos y persecuciones involucrando a tu perra, lo ideal es marcharse antes que la situación empeore.
¿Ayuda la esterilización a mitigar la agresividad de las perras?
La esterilización para mitigar la agresividad de las perras no es recomendada, debido al fuerte dolor que causa este procedimiento puede empeorar la conducta en tu mascota. Además que este es un procedimiento que disminuye los niveles de estrógeno y al mismo tiempo aumenta los niveles de testosterona en la perra, lo cual funciona como detonante para las conductas agresivas. Antes de tomar esta opción tan agresiva, es mejor que pruebes la terapia de modificación de conducta.