Síndrome del cachorro nadador: Qué es, causas, síntomas y su tratamiento

Tener un perrito recién nacido en casa es una grata experiencia, puesto que puedes ver el crecimiento y desarrollo del peludo con el paso de los años, teniendo un compañero siempre disponible para ti. No obstante, esto también representa una gran responsabilidad al estar a cargo de los cuidados básicos del cachorro, así como también de su educación para evitar que el perro cachorro muerda todo o tenga problemas de socialización.

Aunque por otro lado, existen problemas que puede presentar un perro cachorro que se escapan de los cuidados básicos y la educación, debido a que también hay que considerar los problemas hereditarios o aquellos que se presentan por falta de atención. Entre dichos problemas, hoy hablaremos sobre el síndrome del cachorro nadador, las posibles causas, síntomas y su tratamiento.

¿Cuáles son las causas más frecuentes por las que los cachorros lo padecen?

Primero que nada es necesario saber lo que significa el síndrome del cachorro nadador, puesto que esta es una anomalía en el desarrollo de un cachorro que provoca que no pueda caminar de forma normal con sus patas, y al intentar moverse lo hace como si estuviese nadando. Al sentir una gran debilidad en sus extremidades, el cachorro no tiene otra opción que tenderse con el pecho pegado al suelo y las patas extendidas.

Por lo general, los síntomas del síndrome del cachorro nadador comienzan a aparecer entre las primeras dos o tres semanas de vida del perro, puesto que dicho trastorno solamente se manifiesta en canes de dicha edad. Gracias a varios estudios científicos realizados por expertos en animales, se ha podido determinar que las causas más frecuentes por las que los cachorros padecen de este síndrome son las siguientes.

Factores genéticos y sobrealimentación

Aún sin tener certezas seguras, se cree que la predisposición genética de un cachorro influye en la aparición de este síndrome al transmitirse de padres a hijos, especialmente por la cría de cachorros en abundancia. Así como también existen razas de perros que son más propensas a presentar el síndrome del cachorro nadador, como es el caso del Bulldog Francés e Inglés, el Pekinés y el Basset Hound. Sin embargo, esta patología puede presentarse en cualquier raza de perro.

Otro de los principales factores que influye en que un perro padezca del síndrome del cachorro nadador es la alimentación, puesto que una dieta desbalanceada o un déficit nutricional en un cachorro puede ocasionar este problema. Por lo que debes aprender cómo hacer leche casera para cachorros, en caso que estos se encuentren huérfanos y no puedan alimentarse directamente de su madre.

El tipo de cama en que descansa

A pesar de no estar 100% comprobado, también se maneja la teoría que el tipo de cama donde un cachorro descansa puede ocasionar este síndrome, puesto que al utilizar una manta o periódico como una cama para que el cachorro descanse debido a su superficie lisa y sencillez de limpiar, el perro puede resbalar constantemente desde la posición en la que estos se colocan para alimentarse de la leche materna.

Principalmente esto se debe a que al amamantarse del pecho de su madre, los cachorros suelen anclar sus extremidades al suelo para tener un mejor agarre, lo cual ayuda a fortalecer los músculos y articulaciones de las patas. Por lo tanto, al resbalarse constantemente por culpa de la superficie lisa el cachorro no puede desarrollar dichos músculos, haciendo que sus patas se encuentren débiles mientras su cuerpo sigue creciendo y su peso corporal aumentando.

¿Qué síntomas presentan los perros con el síndrome del cachorro nadador?

Si bien el síndrome del cachorro nadador lo hemos mencionado previamente en varias ocasiones, el cual es la dificultad para caminar y pararse sobre sus extremidades, también es necesario mencionar que esta patología viene acompañada de otros síntomas que pueden poner en peligro la salud de tu mascota, además que con ello incrementa el tiempo que puede tardar un cachorro en acostumbrarse a su nueva casa y aprender a socializar con otros animales.

Ahora bien, para que tengas en cuenta lo grave que puede llegar a ser el síndrome del cachorro nadador en tu mascota, te explicaremos a continuación el resto de síntomas que produce esta patología.

Debilidad y dificultad al caminar

Al no tener los músculos de las patas desarrollados de acuerdo a su edad, el cachorro sufre debilidad y dificultad al caminar al arrastrarse por el suelo. Debido a que el perro se arrastra constantemente, este es propenso a lastimarse las extremidades por el roce de ellas con el suelo, aumentando entonces su dolor físico. La hiperextensión de las extremidades del perro también es común al tener dificultades para caminar y moverse arrastrándose, debido a que sus huesos se encuentran moviéndose en un rango más abierto de movimiento del que deberían.

Deambulación, ataxia y estreñimiento

Al no tener total control de movimiento sobre sus extremidades el cachorro padecerá de ataxia, lo cual significa que tendrá falta de coordinación para moverse con normalidad, algo que a su vez genera que este pueda deambular hacia otros lugares del hogar sin quererlo. Aparte, el cachorro tendrá problemas de estreñimiento de forma constante al no poder alimentarse correctamente, así como dificultades para respirar por la posición de su cuerpo.

¿Cuál es el tratamiento que deben de seguir los perros que lo padecen?

Con el tratamiento adecuado, un cachorro puede recuperarse fácilmente del síndrome del perro nadador para que puedas comenzar a entrenar a tu perro cachorro sin problema alguno. Entre las opciones de tratamiento disponibles se encuentra la fisioterapia, que puedes realizar con sesiones diarias de 15 a 20 minutos para que el perro pueda recuperar musculatura en sus extremidades.

Al mismo tiempo también puedes iniciar un tratamiento con suplementos nutricionales como vitamina E o la taurina que ayudan con el desarrollo del organismo del peludo. También se recomienda ayudar al cachorro a alcanzar el pecho de su madre para que pueda alimentarse, asegurándose que este mantenga un peso saludable de acuerdo al desarrollo de sus extremidades.