Cómo alejar a mi perro de mi jardín para que no defeque – Guía de entrenamiento

Es muy probable que en algún momento de tu vida te haya tocado lidiar con tus perros defecándose en sitios no deseados. Es por eso que a continuación se ha recopilado no solo información acerca de como evitar este inconveniente, sino también, una guía para que puedas entrenar a tu mascota y con ello, alejar al animal del jardín y que no defeque allí.

Si colocas una serie de barreras, repelentes y distracciones para el canino, podrás lograr que este no entre a jardín a despojar sus necesidades. De igual manera también existen otras herramientas u opciones a emplear para llevar a cabo la tarea de alejar al perro del jardín y que no defeque en ese lugar.

¿Cuál es la mejor forma de ahuyentar de mi jardín a mi perro?

Existen diversas formas de alejar a los perros, lo mejor que se puede hacer para evitar ahuyentar a los caninos, es entrenarlos desde corta edad, pero si no este no es el caso, sigue los siguientes métodos para mantenerlos a raya.

Restringe el acceso físicamente

Esto puedes hacerlo colocando ciertos obstáculos que impidan el paso del animal, y una opción es colocar una cerca, pero podría conllevar ciertos gastos y en cierto punto, hasta complicado de ubicar. Una de las mejores opciones en este caso, es ubicar una barrera de plantas en el lugar exacto que da al jardín, de esta manera se puede evitar el uso de las cercas.

Existen muchas plantas a prueba de perros que pueden ser colocadas para evitar su paso, como algunos arbustos que sean fuertes. Es muy importante que la planta sea lo suficientemente alta y resistente para evitar que el perro de igual manera pueda pasar por encima, aunque este no es problema si el canino es pequeño, las siguientes son plantas y arbustos capaces de soportar el peso de un perro grande:

• Peonía
• Verbena
• Equinácea
• Rudbeckia
• Salvia Rusa

Crear una barrera utilizando gravilla o mantillo también es eficaz, ya que estos permiten el uso de otros elementos pequeños, de forma que se pueda abarcar todo el jardín, este paso es muy útil, ya que los perros normalmente suelen evitar el contacto con estas texturas.

 Limpia los residuos de orina

Cada que el perro defeque u orine en el jardín, asegúrate de siempre eliminar y limpiar bien el olor y los residuos de que allí quedan. Esto es porque es mucho más probable que un perro regrese al área nuevamente si considera que es agradable.

Cuando un perro hace sus necesidades en un lugar, este deja su aroma allí impregnado, generando así que otros perros puedan hacer lo mismo cuando pasen por allí, ya que asociaran dicho sitio con un baño.

Es probable que la orina de los perros deje marcas de quemadura en el césped o las plantas, así que asegúrate de regar bien esa área para que el olor sea disipado.  Haciendo esto, neutralizas la acidez que está en la orina y puedes reducir el efecto que causa en tu jardín.

¿De qué forma puedo educar a mi perro para que defeque en un solo lugar?

Si tu perro cuenta con una corta edad, este puede ser educado mucho más fácil para que no defeque ni en tu jardín ni en el de los vecinos. No hay que ser alguien especializado en entrenamiento de perros para que estos puedan hacer caso a nuestros mandatos.

Una forma en la cual no tendrás ni que hablar a tu perro para que no defeque en el jardín, es adquiriendo irrigadores. Este increíble método hará que cuando el perro se encuentre ingresando al área donde no quieres que defeque, sea sorprendido y alejado por un chorro de agua fría, la cual siempre será lanzada cuando detecte movimiento. Por su cuenta aprenderán a no visitar dicha área una vez que sean mojados varias veces.

Otra efectiva manera de evitar que los perros defequen en el jardín es enseñarlos a hacer en un solo lugar, esto puede ser llevado a cabo mediante la creación de un espacio que sea acogedor para ellos.

Asegúrate que sea un lugar poco soleado y en el que cuenten con cosas que los ayude a entretenerse y que puedan alimentarse, todo con la intención de atraer al perro a esa área.

Si encuentras al perro en pleno acto, estás en el mejor momento para enseñarle que allí no se debe defecar. Puedes intentar llamar su atención con aplausos o con un elevamiento de la voz, con tal de interrumpir lo que hace y puedas mandarlo a otro lado.

Trata de evitar a toda costa los golpes a tu perro cuando se encuentre haciendo esto u algún otro acto que no te agrade. No se recomienda el uso de la fuerza, ya que esto puede influir negativamente las capacidades cognitivas del perro y puedes llegar a inhibirlo.

¿Qué tan efectivos son los repelentes comerciales para perros?

La composición de dichos repelentes comerciales funcionan como “estímulos aversivos”, en pocas palabras, causan una sensación terrible para todo aquel que lo recibe.

Dichos repelentes son efectivos, pero el daño que causan a nuestras mascotas es grande, ya que funcionan como un castigo, y causa un malestar al perro cuando se acerca, pero las mismas se disipan cuando el perro se aleja.

Esta es una técnica poco recomendada en la educación canina, ya que estos productos suelen contener acción irritante, tóxica y hasta corrosiva, que es peligroso hasta para los humanos.

¿Cómo hacer un repelente de perros para mi jardín?

Puedes mantener alejados a los perros con la ayuda de repelentes que evitarán que se acerquen a defecar en el jardín. Hay diversas recetas caseras que puedes implementar para mantener a raya a los caninos, y no les hará daño alguno.

El repelente más fácil y rápido de crear es una mezcla entre ajo, aceite de oliva y aceite almendras, el cual puedes rociar en las zonas que no quieres que tu perro defeque.

Otra manera de mantenerlos alejados sutilmente, es utilizando una mezcla entre amonio y vinagre, esta se coloca sobre algunas motas de algodón las cuales posteriormente son ubicadas en zonas adyacentes al jardín. Y el último, pero no menos importante, es el repelente compuesto de limón y demás cítricos, como naranjas por ejemplo.

El olor cítrico, y en especial el de los limones, es una fragancia que los perros simplemente no pueden soportar, la elaboración no es para complicada, solo sigue los siguientes pasos:

1. Lleva a hervir 1 litro de agua y cuando esté a punto de ebullición, agrega las cáscaras del limón y demás cítricos.
2. Deja hervir por 20 minutos y luego apaga el fuego, luego tapa la preparación y deja que se concentre allí hasta alcanzar la temperatura ambiente. Si queremos más intensidad, podemos agregar zumo de limón cuando se enfríe.

Hecha ya cualquiera de estas indicaciones, tenemos nuestro repelente casero, el cual es 100% natural, no afectará la salud de nuestro perro y cumplirá con la labor de mantenerlo a raya.

Si transmitimos las normas en el hogar desde los primeros meses de vida de nuestros caninos, evitaremos problema de conducta que estos puedan desarrollar. Es muy importante que también se le enseñe a hacer sus necesidades cuando se encuentre en a calle.

Lo mejor es no reforzar las actitudes que no nos gustan que hagan de cachorros, para que no haya inconvenientes cuando crezcan. Esa es una de las maneras en que evitaremos que nuestro perro defeque o haga sus necesidades en el jardín o donde no queramos.