Cómo hacer que un gato vomite – Tutorial y recomendaciones paso a paso
Todos bien conocemos que los gatos persiguen y van a conocer todo aquello que les genere curiosidad; pueden estar pendiente de lo que estamos usando y qué hacemos, prestan atención a cualquier cosa que se mueva durante sus paseos o van más allá y hurgan en el sitio donde algo les haya llamado la atención. Puede ser un factor muy positivo que sean curiosos, pero más de una vez se han conocido las consecuencias negativas que puede conllevar el curioseo.
Las situaciones se tornan muy complicadas cuando los gatos, sin querer, ingieren o toman sustancias altamente tóxicas para su organismo que, una vez que está dentro de ellos, puede poner en peligro sus vidas y por lo tanto, debemos tener conocimiento de los síntomas así como lo que debemos hacer para sacar la toxicidad de su organismo, en este caso, por medio del vómito inducido.
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¿En qué situaciones debemos hacer que nuestro gato vomite?
Primero que todo, debes estar claro con el hecho de que los vómitos inducidos a nuestros gatos son solamente en situaciones donde su vida corra peligro y necesites hacer que el gato expulse aquello que haya ingerido.
Segundo, lo que más se recomienda es tener un previo contacto con el especialista veterinario de confianza para que este pueda orientarte de mejor manera sobre como hacer que el gato vomite, además de dar el permiso para que procedas a inducir el vómito en el felino.
Después de estos dos factores, queda nuestra intervención en ayuda a que nuestro minino saque de su organismo los que sea que haya consumido y sea tóxico; tengamos cuidado de que si la situación trata sobre que el felino ingirió objetos punzantes que puedan ser filosos como agujas o palillos, lo mejor será llevarlo en seguida a emergencia veterinaria y olvidar el vómito, pues podríamos causar un daño interior mucho más grave.
Dentro de la casa, si el gatito no sale, debemos ser precavidos con las plantas que cuidemos así como de los insecticidas que utilicemos, pues tanto algunas plantas como los insecticidas como tal, son altamente tóxicos para los mininos.
Por otro lado, sabremos que necesitamos ayudar a nuestro gato cuando comienza a mostrar los síntomas de náuseas, aunque sean un tanto complicados de diagnosticar. Si no sabes cuáles son esas señales de que tu gato tiene ganas de vomitar, no pasa nada pues te los contamos: en primer lugar, evitarán la comida, no se acercarán a ella y tampoco comerán, luego es posible que veamos un ligero babeo mientras que hace algunos movimientos con la lengua como si tratase de sacar los restos de comida (que no ingirió) de la boca.
De conocer estos indicadores y saberlos detectar, podremos tomar la decisión a tiempo de llevarlo al veterinario; sin embargo, si no nos da tiempo porque ya conocemos el grado de toxicidad en lo que el gato comió, entonces deberemos actuar.
Comió algo peligroso
Se trata de la situación más común por la que haremos vomitar a nuestro gato; lo que sea malo, dañino o extremadamente tóxico para su cuerpo, organismo y bienestar, necesitará estar fuera del gato lo más pronto posible.
Es necesario que se actúe con delicadeza, pero al mismo tiempo lograr que sea rápido, pues mientras menos dure en el organismo de nuestra mascota peluda, menos complicada se tornará la situación.
Si tienes la ligera sospecha de que bebió o comió algo tóxico, intenta averiguar qué fue y si consumió mucho del producto, al primer sitio donde puedes dirigirte a buscar son donde están almacenados los limpiadores de baño, cocina, etc. Que tengas para tu casa, o checar las matas.
Algunos productos como ambientadores que tienen un olor dulce, son los primeros a los que suelen ir a curiosear y probar, pues es el mismo olor el que les llama la atención; las plantas como el saúco, aloe vera, azafrán, cerezos, muérdagos y además de aquellos productos que contengan cloro son los más perjudiciales para el gato; de darnos cuenta qué fue lo que consumió y si se trata de alguna de las cosas que mencionamos previamente, entonces no dudes en llevarlo de inmediato con su especialista.
Tiene comportamientos extraños
Detectar que un gato tiene algún tipo de problema de salud suele evidenciarse por el comportamiento que ellos mismos toman; algunas situaciones son porque los felinos se vuelven hiperactivos así como otras porque resultan todo lo contrario, la clave es la relación que tengamos con ellos para saber cuándo su comportamiento pasa a ser distinto al que nosotros conocemos.
Hay otros síntomas que también debemos conocer además de estar con una manera de actuar particularmente extraña, algunos de ellos son:
- Se le dificulta respirar
- Tiene diarrea
- Presenciamos que el gato tiene una salivación excesiva, anormal
- Estornuda continuamente o tose de igual manera
- Sus pupilas se mantienen dilatadas
Por último, pero no menos importante: comunícate con el veterinario si tu caso es de cualquiera de las que mencionamos anteriormente. Es necesario que durante todo el proceso en que percibes que el gato está intoxicado, trates de mantenerte calmado o al menos demostrarle calma al gato, recordemos que estos felinos perciben con facilidad las emociones y si nos exaltamos mucho, haremos que se estrese o incluso nos muerda, haciendo un poco más complicada la situación.
¿Cuáles son los casos en los que no es necesario provocar el vómito en nuestro gato?
Así como es importante saber el momento donde debes intervenir en tu gato para hacer que este vomite, también debes conocer el momento en los que no puedes intervenir para causar el vómito inducido en tu mascota; te contamos cuáles son esas ocasiones riesgosas:
- Si la situación es que el felino tomó o comió cualquier tipo de medicamento o fármacos, no hay otra cosa que debas hacer que llamar al veterinario y atender a las instrucciones que él te dé, pues es probable que te prohíba inducirle el vómito y la solución será llevarlo a urgencias.
- Cuando tu mascota felina esté convulsionando olvida en provocarle el vómito, no lo hagas.
- Además de convulsionar, el gatito ya ha tenido varios vómitos recientes, tampoco provoques un nuevo vómito.
- Tampoco debes inducir el vómito en el gato si se trata de un cachorro que tiene apenas unos meses de vida; la situación podría terminar siendo mortal.
- Cualquier tipo de producto químico corrosivo que el gato haya ingerido por error, causará daños a sus vías dentro de su organismo una vez que lo tome. Así que si causas un vómito en el felino, volverá a quemar las vías y el daño resultará mayor.
- De igual manera debes olvidarte de un vómito inducido si encontraste que el tipo de objetos que el gato se comió son punzantes, bien sean agujas, alfileres, cuchillas, u otros; acude de inmediato al veterinario, pues se trata de un caso de urgencias que necesita ser atendido a la brevedad posible.
- Si quizá te das cuenta muy tarde de que el minino consumió algo tóxico hace un aproximado de dos horas, evita provocar el vómito, ya que lo que sea que haya ingerido, está en su intestino y no tendrá razón hacerle vomitar, pues no hay algo que pueda expulsar.
- En los casos donde el gato está inconsciente y por ende no puede tragar, no provoques el vómito. Si el felino no puede tragar y le induces el vómito con algún tipo de contenido, es posible que estos no caigan en su estómago, sino que se almacenen en otros órganos como el pulmón; en este punto la situación será de total riesgo para la vida del minino e incluso, podría terminar perdiendo la vida.
¿De qué forma puedo hacer que mi gato vomite inmediatamente?
Cuando nos referimos a un vómito inducido en nuestro gato, normalmente se trata de hacer beber alguna sustancia que les provoque expulsar el contenido de su estómago. No olvidemos que cada gato es un mundo distinto por lo que si decides administrarle cualquiera de las sustancias que te indicaremos a continuación, será mejor que el veterinario primero las apruebe y entonces procedas a hacerlo.
Con agua oxigenada
Administrar agua oxigenada para que el gato vomite no es tan complicado como pudiéramos imaginar, pero debemos ser cuidadosos con las cantidades que le daremos al gato. Primero asegúrate de que el agua oxigenada que tienes en casa sea del 3% debido a que estamos hablando de una sustancia tóxica y si sus niveles son mayores al mencionado, causará más daño al felino.
Así como debes saber que bajo ningún tipo de urgencia o circunstancia el agua oxigenada que le darás al gato, no debe ser el producto que se usa para la decoloración del cabello; si el gato llega a ingerirla, fallecerá.
Recomendamos administrarla con una jeringa; las dosis suelen varias, pues estas dependen del peso de nuestra mascota peluda, aproximadamente 10 ml por cada 2.5 kg., es el promedio que podemos demostrar. Trata de no entrar en pánico si ves que al administrarle la dosis, notas espuma en la boca del felino, es una reacción normal.
Si tu gato está un poco nervioso e inquieto, te recomendamos que lo envuelvas en una toalla o cobija donde sus cuatro patas queden envueltas, así podrás tener un mejor dominio en su cabeza al momento de proporcionarle el agua.
Dale el agua por medio de la jeringa y si no tienes una, entonces una cucharilla; intenta darle el líquido por los lados de las mejillas y que este caiga poco a poco. Podemos imaginar que el sabor de la sustancia no será agradable para nuestro felino, así que si tienes helado de vainilla o miel, endúlzala un poco para que no haya más complicaciones en el momento en que el minino la tome.
Utiliza ropa vieja porque el agua oxigenada tienda a manchar la ropa y queremos evitar que dañes tu franela favorita; olvídate de inducirle vómito con otras sustancias como el alcohol, éter, leche o vinagre.
Por último, recomendamos que busques un pequeño recipiente en el que puedas guardar una muestra del vómito del gato, podrás dársela al veterinario y que este se encargue de examinar y precisar qué lo que el gato ingirió.
Auxíliate de la sal
Puede resultarnos un tanto extraño que recomendemos la sal, debido a que se supone que es un ingrediente que no debe estar en la dieta alimenticia de los mininos; no obstante, este producto es una buena herramienta para inducir al vómito. De igual manera y con relación al punto anterior, primero pide la aprobación del especialista veterinario para usar este ingrediente.
Se trata de disolver entre 1 a 3 pequeñas cucharadas de sal en 300 mililitros de agua, agárrala con una jeringa y deposita la sustancia directamente en la garganta del minino; de notar que el gato no vomita, deberás repetir el procedimiento luego de unos 10 minutos.
¿Qué puedo hacer si no logro producirle el vómito a mi gato?
En este punto te comentaremos sobre algunos métodos que se emplean en las situaciones donde los gatos no son capaces de vomitar aquello que ingirieron, pero podemos ayudarlos para que no sea absorbido por su sangre.
Carbón activado
La dosis a administrar es de tan solo 1 gramo por cada kilogramo de peso en el felino; puedes recurrir a los sitios naturistas que son donde normalmente lo venden. Se emplea este remedio porque tiene el objetivo de absorber o eliminar las impurezas que se presencien en la sangre.
Enema
Los enemas rectales son un sustituto en caso de que el gato por nada del mundo quiera o pueda devolver la sustancia que haya ingerido.
Laxantes
Recurre a los laxantes si no logras que el felino vomite, de esta manera su organismo se estará limpiando por completo: desde el estómago al tracto intestinal.
Una vez más, nos aseguramos de que no olvides lo indispensable que es comentarle al veterinario lo que vayas a administrarle al gato cuando se trata de remedios naturistas o que no están recetados por ellos; debemos ser cuidadosos con el cuidado al organismo del felino y más si se trata de una circunstancia delicada por intoxicación.