¿Cómo curar la conjuntivitis en gatos? – Síntomas, cuidados, tratamiento y remedios caseros

Es bien sabido que la conjuntivitis es una infección común en gatos bebes, pero, ¿qué es la conjuntivitis?, se describe como un padecimiento que ocurre en la membrana mucosa que protege al globo ocular, cuyo nombre es conjuntiva del ojo.

La conjuntivitis puede ser una infección aislada o ser síntoma de alguna otra patología como el glaucoma gatuno. Por lo que, es importante acudir con un médico veterinario antes de proceder a darle algún tipo de tratamiento, ya sea remedio natural o medicamento.

¿Cuáles son los síntomas que indican una infección en los ojos de nuestro gato?

Los síntomas principales que pueden indicarnos que nuestra mascota tiene conjuntivitis son los siguientes, si llegas a observar algunos de ellos en tu felino, no dudes en llevarlo con un médico veterinario.

• Ojos enrojecidos.
• Lagrimeo ocular constante.
• Legañas abundantes, en coloraciones amarillas o verdosas.
• Dificultad en el minino para abrir los ojos u ojo cerrado por completo.
• Rascado constante de ojos por parte de tu gatito.
• Inflamación del tercer párpado.
• Cuando la infección está avanzada puede opacarse la córnea y dar la apariencia de que el ojo se vea nublado.
• En el caso de que el padecimiento lleve mucho tiempo, se puede presentar cambio en el color y la forma del iris.
• Si tu minino presenta otros síntomas como falta de apetito, poca higiene en su pelaje, fiebre o se muestra apático, deberás acudir con urgencia con el médico veterinaria, ya que es posible que esté enfermo de algo grave.

¿Qué tomar en cuenta para los cuidados de la conjuntivitis de nuestro gato?

Es importante mantener la higiene de los párpados superiores e inferiores. Esto se puede realizar con ayuda de una gasa humedecida con solución salina estéril, limpiando con mucho cuidado desde el lagrimal hasta el extremo contrario del párpado. Dicha acción también puede ser ejecutada antes de colocar el tratamiento para la conjuntivitis en el ojo.

Como se mencionaba antes, es indispensable evitar que el gatito continúe rascándose los ojos. Por lo que colocarle un collar isabelino puede ser de mucha utilidad para facilitar su recuperación. Otro factor a considerar es que un gato bien alimentado y con un sistema inmune fuerte sanará más rápido que uno que no come bien y no consume vitaminas.

Por tanto, se puede adicionar a la dieta del felino vitaminas A y C, debido a que la vitamina A ayuda a la visión y la vitamina C desacelera el declive en la salud del globo ocular. Como dato último, pero no menos importante, se debe tener en cuenta que al ser la conjuntivitis una infección, es fácil que otros gatos bebes puedan contagiarse.

Si tienes más felinos en casa, será de vital importancia mantenerlos separados e incrementar los hábitos de higiene de todas las superficies y artefactos que hayan tenido contacto con el minino enfermo. Como camas, juguetes, paredes, recipientes para comida, ropa, entre otros.

¿Cómo curar ojos llorosos y nublados en gatos bebes?

Si la vista de tu gato tiene una capa blanca encima, puede ser más común de lo que se piensa. Aunque, no deja de ser una alteración de órganos y tejidos, por lo que se debe tratar como una enfermedad y curar. La detonante de los ojos nublados pueden ser varias, entre ellas:

Glaucoma, es una enfermedad que aumenta la presión intraocular del nervio óptico, por lo que se degrada y hace acumular fluidos que tapan la vista. Esto, por lo general, sucede en hembras jóvenes o de avanzada edad. Entre los síntomas más frecuentes se encuentra, el enrojecimiento ocular, el cambio de humor, sensibilidad a la luz y pupilas asimétricas. El tratamiento para curar consta de inhibidores, colinérgicos y betabloqueantes.

Cataratas, suele ser una enfermedad hereditaria que puede dejar en ceguera total al felino. Una mancha gris se empieza a apoderar de la vista del gato, en conjunto con ojos húmedos. El tratamiento más efectivo para curar es la cirugía y como remedios caseros, el colirio.

Clamidiosis, es una enfermedad contagiosa que conlleva conjuntivitis, fiebre, lagrimeo u ojos nublados y perdida del apetito. Por lo general, se puede aliviar o curar con antibióticos y una buena higiene en los ojos.

¿Cómo quitar lagañas de un gato?

Para limpiar las lagañas derivadas de infecciones en los ojos del gato, se deben limpiar cada dos días y quitarlas con un algodón humedecido en agua hervida o suero fisiológico. Con ello, se trata de quitar todo lo posible, moviendo suave la gasa alrededor de los ojos llorosos, sin tocar el globo ocular para no lastimarlo.

¿Cómo se realiza el tratamiento de una infección en los ojos de un gato?

Para el caso en el que la infección sea aislada y no síntoma de otra patología aún más grave. El tratamiento se basa en la aplicación de colirios antibióticos con cloranfenicol en la pupila del felino. Acompañado con el uso del collar isabelino para evitar que el minino continúe rascándose, evitando así la mejora ocular.

Remedios caseros para las infecciones de los ojos en gatos

Desde los inicios de la civilización, el uso de plantas y hierbas ha sido la base de la medicina en el mundo de los remedios caseros. Por ello es común que se recomienden los lavados oculares con infusiones de manzanilla o tomillo en casos como la conjuntivitis gatuna. Por otro lado, es un hecho que las infusiones pueden llegar a contener pequeños residuos de ramitas u hojas, por lo que su uso sería contraproducente para curar.

Debido a que estas pequeñas partículas podrían empeorar el estado de ojo de tu mascota, estos remedios caseros no son del todo recomendadas por un médico veterinaria. Sin embargo, en la actualidad existen colirios elaborados a base de plantas y hierbas benéficas para calmar algunos malestares de tu gatito y que son seguros de usar para curar.

Otros remedios caseros y efectivos para calmar la inflamación y comezón ocular son las compresas frías y calientes. El método es muy sencillo, consiste en humedecer una compresa con agua fría y colocarla durante unos minutos sobre los ojos llorosos u ojos infectados. Retirarlo para a continuación repetir este paso con una compresa con agua caliente, teniendo cuidado de no quemar a nuestra mascota.