¿Por qué mi gato tiene los ojos de dos colores distintos? – Heterocromía felina

En algunas razas de gatos, principalmente las de pelaje blanco, se presenta una condición especial respecto al color de sus ojos. Si alguna vez has visto un gato con los colores de los ojos distintos, no te extrañes, es algo más común de lo que crees.

La heterocromía es la alteración de la coloración del iris, causando que cada ojo sea de un color distinto. Esta condición no es única de los gatos; también se presentan en otras especies de animales, e inclusive en los humanos. Aquí en el Blog de Animales conoceremos más acerca la heterocromía felina y qué implica ésta en su salud y genética.

¿Cómo se clasifican los distintos tipos de heterocromía felina?

Dependiendo del alcance de color en el iris, la heterocromía se puede clasificar en tres tipos distintos, todos pudiéndose presentar en gatos:

Heterocromía completa

En este tipo, cada ojo tiene su propio color de forma clara. Por lo general, un ojo es de color azul y el otro es de color verde. Este es el tipo que suele atraer a los tutores de gatos por el toque exótico que les da a los gatos.

Heterocromía parcial

En cambio, en la heterocromía parcial, el iris de un solo ojo presenta dos colores distintos. Por ejemplo, un ojo se divide en azul y verde. Este tipo de heterocromía es más común en personas que en gatos.

Heterocromía central

La parte central del iris es de un color distinto, dando la impresión de que de la pupila salieran líneas de otro color. Esta se presenta comúnmente en gatos de distintas razas.

Como hemos mencionado, en razas de gatos de pelaje blanco es común la heterocromía, principalmente la completa.

¿Qué causa la heterocromía en los gatos?

En los gatos, este fenómeno de tener un ojo de un color y un ojo de otro color se puede deber a dos causas: genética o por una condición de salud.

Heterocromía genética

La genética de los gatos es muy interesante. La heterocromía en los gatos puede ser de origen genético. Esto significa que pueden nacer con ella o presentársele al poco tiempo de nacidos. Se le conoce como heterocromía congénita.

La verdadera tonalidad de los ojos de los gatos se manifiesta claramente entre las 7 y 12 semanas de nacidos. Por lo que si tu gato ya pasó esta etapa de su vida, ya deberías saber si tiene heterocromía congénita o no.

Algunas de las razas de gatos que son propensas a tener heterocromía congénita son el angora turco, esfinge, persa, bobtail japonés, van turco, entre otras. Se tiene la creencia de que los gatos de pelaje blanco que no tienen heterocromía son propensos padecer de discapacidad auditiva.

Otra curiosidad de este tipo, respecto a la genética de los gatos, es la de que todos los gatos tricolores son hembras, por lo que es bien interesante conocer sobre ella.

Así mismo, en algunos casos, la condición congénita se presenta debido al síndrome de Horner. Un ejemplo claro de la heterocromía congénita son los gatos de raza Khao Manee.

Heterocromía adquirida

Por otro lado, si se presenta un cambio en la coloración de la iris en gatos mayores esto se puede deber a una condición, tal como una enfermedad o lesión. A este tipo de heterocromía se le conoce como adquirida.

Esta condición es poco frecuente, por lo que si se presenta en tu gato lo mejor es que acudas al médico veterinario. Algunas de las causas de este tipo de heterocromía son: diabetes, hemorragia ocular, traumatismo, uveítis, entre otros.

¿Debería acudir al veterinario por la heterocromía en mi gato?

En el caso de que tu gato tenga heterocromía desde su nacimiento o crecimiento, no hará falta. Se ha demostrado que los gatos con esta condición congénita no sufren de problemas de salud asociados a la misma.

Por otro lado, si tu gato es mayor o está en la vejez y se presenta la condición allí sí deberías acudir a un veterinario para cerciorarte qué la está causando. No se debe confundir la coloración blanquecina del iris del gato con heterocromía, siendo este un síntoma del glaucoma.

Alrededor de esta condición existen otras curiosidades asociadas tales como que el gato angora del profeta Mahoma tenía heterocromía. Así mismo, como mencionamos, los gatos blancos son más propensos a sufrir de sordera si no tienen heterocromía.

Aunque los gatos con heterocromía completa sean los preferidos por la mayoría de la gente, no cabe duda que tener un gato trae muchos beneficios.