Ictus felino: Qué es, tipos, causas, síntomas, tratamiento y secuelas

El ictus es un derrame cerebral que puede producirse cuando algún vaso sanguíneo del cerebro se rompe y causa una hemorragia hacia el cerebro. Este derrame cerebral no únicamente se puede ocasionar en los humanos. Animales como los gatos también pueden presentar ictus.

Las lesiones cerebrales como el ictus felino, tienen ciertas causas, síntomas, tratamientos y secuelas. En breve, te mostraremos qué tipos de ictus felino hay, qué lo provoca, cuáles son los síntomas del ictus en gatos, cómo se diagnostica y cuál es el tratamiento.

¿Cómo se clasifican los distintos tipos de ictus felino?

El ictus felino no viene en una sola clase. De esta lesión cerebral tan peligrosa hay al menos tres clases. Cada uno de estos tipos de ictus es de distinta gravedad y dejan secuelas distintas. Presta atención a cada una uno de estos tipos de ictus felino:

Ictus embólico

Este Ictus es de los que comúnmente sufren la mayoría de los gatos y se produce por un coágulo de sangre en un lugar del cerebro por donde no debería haber sangre. El cerebro es algo muy delicado tanto en el caso de los humanos como en el caso de los animales.

Por eso, cuando estos coágulos de sangre se producen en esa parte del organismo de un gato, el cerebro lo rechaza de inmediato y a causa de eso se ve bastante afectado. Las Ictus embolicas afectan más que todo la circulación cerebral, pero esto también afecta otras partes del organismo.

Cuando los gatos pasan por una Ictus embolica, corren el riesgo de quedar sufriendo de una enfermedad neurológica. Este tipo de enfermedades están relacionadas con el sistema nervioso del cuerpo.

Ictus trombótico

El Ictus trombótico se produce cuando se hacen coágulos de sangre justo en el torrente sanguíneo del cerebro. Los coágulos de sangre son como masas de sangre semi sólidas las cuales en vez de desplazarse por el torrente sanguíneo, se quedan alojadas en un sólo lugar del torrente.

Esas semi partículas de que se quedan en un mismo lugar del torrente sanguíneo van trabando otras semi partículas de sangre que se desplazan por el torrente, hasta que se forma como una pared. Al formarse esa pared, esta logra detener el paso de la sangre lo cual a su vez produce la trombosis.

Las trombosis dentro del cerebro son bastante peligrosas, ya que pueden hacer que el felino pierda la vida o que quede discapacitado. Aunque el Ictus no se considera una enfermedad mortal para los gatos, sí es bastante peligrosa ya que es difícil llegar a diagnosticarla.

Ictus hemorrágico

El último tipo de Ictus que les puede dar a los gatos es el hemorrágico. Esta clase de enfermedad no es como otras enfermedades virales y leves que les dan a los felinos. El Ictus hemorrágico se presenta en los gatos cuando un vaso sanguíneo tiene una rotura desde donde se expulsa sangre al cerebro.

Aunque algunas veces esa sangre no se convierte en coágulos, la verdad es que sigue representando un problema porque no le permite al cerebro hacer bien su trabajo de irrigación. Para ser más exactos, la irrigación es la limpieza que realiza el cerebro en cada una de sus partes.

¿Qué es lo que causa que un gato padezca de ictus?

Hablando claro, el Ictus es una enfermedad la cual al final le causa un derrame cerebral a los gatos. En el caso de los gatos, el Ictus puede darse por las siguientes cosas:

• Coágulos de sangre después de alguna cirugía.
• Tumores de origen extravasculares.
• Enfermedades cardiacas.
• Intoxicación.
• Enfermedades hepáticas.
• Hipotiroidismo.
• Diabetes mellitus.
• Problemas renales.
• Sangre con demasiado coagulación.
• Hipertensión.

Esas son algunas de las razones por las que los gatos pueden llegar a padecer de Ictus trombótico, Ictus hemorrágico e Ictus embólico.

Síntomas que presentan los gatos con ictus

Los síntomas del Ictus en gatos son un poco difíciles de identificar, ya que se parecen mucho a los de ciertas enfermedades neurológicas que experimentan los felinos. La única forma de saber con exactitud si un gato padece de Ictus es realizándole un análisis avanzado. Sin embargo, estos son algunos de los síntomas que experimentan los animales con ictus:

• Desorientación.
• Inclinación de la cabeza hacia un costado.
• Maullidos frecuentes de dolor.
• Ataxia.
• Vómitos.
• Temblores.
• Debilidad.
• Anorexia.

Proceso de diagnóstico que siguen los gatos que sufren ictus

Para diagnosticarle con exactitud el ictus a un gato, se le tienen que hacer los siguientes exámenes avanzados y pedirle a un veterinario que los analice:

• Resonancia magnética.
• Análisis sanguíneo.
• Análisis de orina.

¿Qué tratamiento deben de seguir los gatos con ictus?

Los tratamientos que se usan para el Ictus en gatos te los debe indicar el veterinario, pero en su gran mayoría esta enfermedad se trata con:

• Manitol.
• Administración de oxígeno.

Estas dos cosas se usan bajo mano de expertos para tratar el Ictus de manera segura. Este tratamiento se suele emplear en al menos unos tres días.

Secuelas que deja el ictus felino

Aunque el Ictus en los gatos se logre tratar y se saque de zona de riesgo al animal, este en el futuro puede quedar sufriendo varias secuelas. Las secuelas que puede dejar en Ictus en los animales son:

• Depresión.
• Irritabilidad.
• Lagunas y poca coordinación.