Palomas recién nacidas | Guía de cuidados, alimentación y alojamiento en casa

Las palomas probablemente sean uno de los animales con los que más convivimos tanto en zonas urbanas. Debido a la alta población de palomas es bastante común que estos animales decidan hacer sus nidos en cualquier lugar posible. Si por alguna razón, te topaste con un pichón de paloma, y quieres ayudarlo para que crezca tienes que seguir una rigurosa serie de pasos, ya que el cuidado de estos pichones es muy complicado.

¿Cuáles son los cuidados que debemos de tener con las palomas recién nacidas?

Lo primero que tenemos que saber es si sólo lo vamos a ayudar en sus primeros días, o si vamos a proseguir con los cuidados hasta que sea una paloma grande. Una vez hayas tomado la decisión, es importante que decidas el lugar donde lo vas a tener, por lo general, en sus primeros días debemos tenerlo en una caja, puesta en un lugar oscuro y cálido, alejado de cualquier peligro y de las condiciones adversas del clima.

Es importante tener ciertos elementos esenciales como: Una malla para que este pueda desarrollar el agarre en sus patas. Un manta para el piso, no se permite arena ni aserrín. Y por último una manta extra para poder proteger al pichón del frío.

Normalmente, a estos pichones se les tiene que tener una fuente de calor tenue, como un bombillo especial en el mejor de los casos, si no se dispone, una botella con agua tibia y un calcetín son ideales, sobre todo en las noches.

¿En dónde podemos albergar a una paloma recién nacida?

Las palomas o pichones, deben estar en lugares cálidos y medianamente oscuros. Lo ideal es disponer de una caja, en la cual haya una manta como piso, y otra para arroparlo. También es importante la fuente de calor.

Esta caja debe estar en algún lugar de nuestra casa en la cual no haya humedad, filtraciones, o fuentes de calor fuertes, como un radiador, una caldera o un horno. De igual manera, tiene que estar en una parte de la casa donde los depredadores como gatos no los alcancen.

¿Qué comen las palomas recién nacidas?

En circunstancias normales, las palomas comen la llamada ‘leche de buche’, la cual es una sustancia llena de enzimas necesarias para su crecimiento, esta leche no es para nada parecida a la leche que imaginamos.

La ‘leche de buche’ se produce cuando la paloma adulta regurgita la comida dentro del buche del pichón, es un proceso natural que no se puede recrear. En ciertos mercados venden una papilla con enzimas parecidas a las que produce la mamá paloma, las cuáles sirven para alimentar al pichón en sus primeros días de vida.

Pero siguiendo con la premisa de que el pichón perdió a su madre, tendremos que alimentarlo por nuestra cuenta, cualquier tipo de papilla sirve, lo importante es que esta sea de alguna fruta. Debemos evitar darle leche o migajas de pan. 

Lo más recomendado, es que dispongas de la papilla especial para palomas bebés, ya que esta tendrá el grosor ideal, así como la cantidad de nutrientes necesarios para que poco a poco nuestro pichón vaya creciendo.

Si no dispones de la papilla especial, existen varias formas de emular un alimento, puedes tomar frutas, mezcladas con agua y volverlas totalmente papilla, o bien, puedes tomar un pienso para cachorros y hacer el mismo proceso.

¿De qué forma podemos alimentarlas?

Con los pichones bebés no puedes simplemente llegar, poner la papilla en un plato y ponerla para que estos coman, ya que no tienen la suficiente autonomía para hacer esto, es por eso que tienes que disponer de 2 instrumentos primordiales para poder alimentarlos, los cuales son:

Jeringa

Este método consiste en introducir toda la papilla en una jeringa, para posteriormente introducir esta en el pico del pichón para que este pueda empezar a comer. Existe otro método, el de la papilla y la sonda, pero este es sólo para expertos, ya que de hacerse mal, puede causarle mucho daño a la paloma.

El método de la jeringa y la sonda, consiste en ponerle una sonda o una vía a la jeringa, de manera que puedas meter la sonda en el buche del animal, para así controlar mejor que este pueda tragarse y digerir la comida. Es bastante efectivo para que estemos 100% seguros de que la paloma aprovechará la comida, pero como te comentamos, es peligroso si no sabes hacerlo.

Biberón

El biberón tiene el mismo principio que la jeringa, y es que introduciremos la papilla en el biberón, luego cortaremos la punta, de forma que la paloma pueda introducir su pico en ella, y así la podremos alimentar. Este método simula el método de biberón de un bebé, con la particularidad de que la paloma no tendrá que chupar la boquilla.

¿Qué puedo darles de comer si sus padres no están cerca?

Cómo te comentamos anteriormente, es imperativo brindarles comida fácil de digerir, ya que estos animalitos no mastican su comida a esta edad, es por eso que cuando nacen y están con su madre, esta les regurgita el alimento directo en sus picos, y ellos lo tragan entero.

Su dieta en esta etapa de su vida, si no se dispone de una papilla especializada, ya que estamos conscientes de que a veces puede llegar a ser un poco complicada de encontrar, radicará en frutas o alimentos diluidos en agua para que puedan ser introducidos en su boca, sin la necesidad de que este mastique.

Receta

Una receta bastante usada para esto, es cuando no se dispone de la papilla especial, y se toma un poco de pienso para cachorro, se diluye con agua, creando una pasta y posteriormente se emplea alguno de los 2 métodos, el de la jeringa o el de la papilla. Otra receta bastante común, es la de frutas como el mango, la papaya o el platano, diluidos en agua y convertidos en papilla.

Porción

La porción equivale a la capacidad del buche del animal, es importante lograr que este buche se llene correctamente, eso lo notaremos fijándonos en la parte trasera del cuello del pichón, cuando veamos algo abultado, ese será el buche lleno. Cuando se ‘llena el buche’, se tiene que esperar un tiempo a que este se vacíe por completo para volver a introducir comida.

Los cuidados de un pichón son una ardua labor, labor que tiene que ser tomada en serio por quien decida hacerse cargo de esta pequeña ave en esta etapa tan delicada de su vida.