¿Por qué mis perras no se llevan bien y se atacan entre sí? – Solución

La convivencia entre dos perras dentro del mismo hogar es un proceso que tiene muchos matices, ya que en principio puede que no tengan problema alguno pero con el paso del tiempo es posible que empiecen a aparecer problemas entre ellas. Aunque este tipo de situaciones suelen ser atribuidas a los cambios hormonales y es posible evitar que una perra en celo sea agresiva, es posible que los problemas sean originados por otros motivos.

La agresividad entre dos mascotas es un problema serio que debe atacarse de forma inmediata, antes que una de las perras u otra persona resulte herida en un incidente. Para ello, es requerido determinar raíz de estas conductas violentas, así que te explicaremos por qué tus perras no se llevan bien y se atacan entre sí, así como las posibles soluciones a este problema de convivencia.

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¿Cuál es la razón por la que las perras no se suelen llevar bien?

Son muchos los factores que influyen en la relación positiva o negativa entre las perras de la casa, dado que la personalidad de ambas es un elemento fundamental a tomar en cuenta, dado que existen razas de perros que suelen ser más sociables, así como también hay razas caninas que son todo lo contrario y necesitan de ayuda para socializar con otros miembros de su especie.

Por lo tanto, la reacción natural que tienen las perras al encontrarse dentro del mismo hogar no es tener una relación y socializar desde el principio, este es un proceso que lleva tiempo y necesita que las personas encargadas de cuidar a las perras pongan de su parte, para poder crear un ambiente donde ambas se sientan seguras y no tengan que pelear por atención o territorio.

A pesar que las razones por las que las perras no se suelen llevar bien en casa son diferentes en cada situación, generalmente estos problemas de convivencia ocurren por los siguientes motivos.

La presentación no ha sido la adecuada

Si tienes planeado tener dos perras como mascotas en la misma casa no es recomendado simplemente ingresar una al ambiente familiar sin previa presentación, ya que una perra que se encuentra acostumbrada a ser la única mascota del hogar puede sentirse amenazada ante la presencia de otra, lo cual provoca que reaccione de forma agresiva como una manera de defender su territorio.

Lo ideal es que las perras puedan conocerse en un ambiente que no sea el hogar para que puedan irse familiarizando. Puedes probar algún espacio al aire libre para que las perras tengan la oportunidad de jugar y pasear juntas, dándoles recompensas por su buen comportamiento en forma caricias o comida. De esta manera, ambas perras podrán sentir que la buena relación entre ellas trae beneficios.

Otro factor clave para lograr que la presentación entre ambas perras sea positiva es la educación que estas recibieron a temprana edad, puesto que una perra que haya podido socializar con otros de su especie tendrá menos problemas para adaptarse a vivir con otra. Pese a que hay muchas opciones para hacer que tu perro sea más sociable y cariñoso, esta es la más efectiva de todas.

Hay una diferencia en la edad

Para poder tener dos perras en casa y que estas logren establecer una relación saludable sin desarrollar tendencias agresivas, es necesario que la diferencia de edad entre ambas no sea muy grande, preferiblemente es recomendado que ambas perras se encuentren en el mismo rango de edad o muestren una personalidad similar, para compartir actividades sin chocar entre ellas.

Si tienes una perra que está cerca de entrar en la etapa de anciana es una mala idea juntarla con una perra joven, dado que las diferencias que existen entre las rutinas de ambas son muy grandes. Una perra anciana necesita descanso y tranquilidad, por lo que la personalidad energética de una cachorra puede detonar un comportamiento agresivo en ella, puesto que se sentirá incomoda ante su presencia.

No las tratas igual

Los perros son animales con una gran capacidad sensorial capaz de notar cualquier tipo de cambios corporales en una persona, o la manera en la que estos son tratados. Por lo tanto, si la manera en la que tratas a una perra difiere de tu conducta hacia la otra, esta se dará cuenta en poco tiempo y no será algo de su agrado, lo cual trae como consecuencia que desarrolle problemas de conducta o intente llamar tu atención constantemente.

Estos problemas surgen generalmente cuando traes a una nueva perra a casa y la otra ya tiene tiempo viviendo contigo, puesto que una persona se ve naturalmente atraído a brindarle más atención a la nueva mascota para ayudar con su proceso de adaptación. Sin embargo, al sentir relegar a una de las perras a segundo plano, inconscientemente estas creando una situación tensa en el hogar.

¿Cómo saber si el problema de tus perras es hormonal?

Para poder controlar a los perros agresivos es necesario determinar si este problema está siendo provocado por un desbalance hormonal en tus mascotas, dado que las perras tienden a sufrir cambios de personalidad cuando se encuentran en celo. Dichos cambios hormonales hacen que una perra se encuentre sensible, por lo que puede volverse agresiva fácilmente.

Generalmente las perras experimentan el celo dos veces al año, cada semestre por una duración de 15 a 21 días. Puedes saber si una de tus perras está en celo si los cambios en su comportamiento son constantes, empieza a orinar más seguido, tiene menos energías de lo usual y presta más atención a los machos.

¿Qué debes hacer para evitar que tus perras se peleen o ataquen?

Para poder prevenir este tipo de situaciones peligrosas entre tus perras es necesario seguir la siguiente serie de medidas preventivas: retirar el detonante de los problemas, evita castigar a tus mascotas, practica comandos de obediencia a diario, cuida del estado de salud de tus perras y asegúrate que ambas tengan tiempo para salir de paseo y socializar en otros lugares.