¿Qué hago si mi perro tiene gases y qué le puedo dar para que los saque? – Remedios caseros
Los gases estomacales es una de las afecciones más comunes de detallar en cualquier persona o animal, ya que es algo netamente natural e innato, en muchos casos resulta que aparecen de forma indeseable y salen sin que lo queramos. Sin embargo, pueden haber muchos factores que influyen para la acumulación y posterior expulsión de estas flatulencias, pero en la mayoría de ocasiones ocurre es por la alimentación.
Tu mascota canina no se escapará de ellos, puede ser que se le salgan sin que lo note y contamine el olor por toda la casa, donde debes saber a qué se deben y buscar una forma de remediarlo. Nosotros te ayudaremos con esto para que no tengas más problemas del estómago canino; además de que si sucede con mucha frecuencia, puede estar relacionado a una patología en su sistema digestivo y tendrás que llevarlo a un especialista con urgencia.
¿Cuáles son las causas más frecuentes por las que los perros tienen gases?
Como se dijo anteriormente, una de las principales causas por las que un perro pueda tener gases va relacionada directamente con su comida, esto incluye tanto a los alimentos como a la forma de digerirlos. Cuando veas que tu canino come con desespero o mucha ansiedad, lo cual genera que ingiera mucho aire debido a la velocidad con que introduce los alimentos, de tal modo que no los mastica bien y ocasiona problemas digestivos.
Debes estar muy al pendiente con este comportamiento, ya que necesitas corregirlo antes de que sea tarde, porque si lo dejas pasar desapercibido, tendrás que lidiar con torsiones gastrointestinales, obstrucciones, sangrado en las heces y otros similares. Todo ello ocurre por la mala digestión de los alimentos.
Aunque también los gases pueden aparecer por ciertos nutrientes que van alterando el organismo de tu can sin que te des cuenta. Un ejemplo de ello son todos los cereales como el sorgo, arroz y maíz que son ricos en carbohidratos, pero que en los perros no genera más sino una fermentación y posterior a ello un exceso de gases e inflamación estomacal.
Por ende, es necesario garantizar una alimentación saludable. Si es comida casera, debe ser en base a proteína animal (sea de res, pollo, cerdo, pescado…) con algunos vegetales o unas ricas recetas que puedes hacer con ingredientes económicos; todo ello bajo en sal y también sin que haya mucha fibra ni carbohidratos que le hagan daño a su digestión.
Aunado a ello, en caso de darle solo alimento seco, se requiere establecer uno de los mejores pienso para alimentarlo; debe ser de alta calidad y obviamente donde su componente principal sea la proteína, seguido de minerales, vitaminas, antioxidantes, bajo en grasas e hidratos de carbono.
También, los gases estomacales pueden ser generados como reacciones alérgicas del sistema inmunológico de tu perro hacia determinadas sustancias o alimentos que ingiere, entre ellos está el pollo, los huevos, lácteos, etc… Así que si tu perro es alérgico a un alimento, es mejor que no se lo des, ya que dichas alergias internas acumulan gases que luego deberán salir.
Por último, pero no menos importante, están algunas patologías que influyen para ocasionar estas flatulencias en tu mascota. A continuación te enlistaremos una de las causantes de estos olores desagradables que arroja el can.
- Parásitos intestinales
- Irritación estomacal
- Hinchazón abdominal
- Mala digestión
¿Qué síntomas se presentan cuando un perro tiene muchos gases?
Para que puedas identificar con mayor facilidad la presencia de gases estomacales en tu perro, hay una serie de síntomas que nos van indicando dicha afección. Además de la salida del gas y su mal olor, puedes reconocerlo cuando no los botan y comienzan a comportarse extrañamente.
Se genera una sensación de incomodidad en el canino y se mueve de un lado al otro echado en el piso, estira sus patas delanteras y las de atrás las deja sostenidas; puede haber pérdida de apetito y no beber agua con normalidad, disminuye su actividad física, se inflama gran parte de su abdomen y hay unos sonidos como burbujas dentro de él. Cuando los detectes, es necesario actuar de una vez.
¿Cómo debemos proceder si nuestro perro tiene gases?
Ahora bien, luego de identificar la presencia de flatulencias en tu mascota, se requiere que tomes cartas en el asunto. Lo ideal es llevarlo al veterinario, pero en casos leves o detectados a tiempo, podrás ayudarle con algunos medicamentos que se encuentran en alimentos o comprarlos en una veterinaria, de manera que sean aptos para el consumo animal.
Utiliza probióticos para atacar directamente las bacterias que ocasionan dicho malestar en tu perro. Estos tienen la tarea de mejorar la digestión y absorción de los nutrientes esenciales para su organismo, podrías darle un yogur sin azúcar que lo contiene o en medicamentos. También puedes emplear prebióticos con alimentos ricos en fibra que puedan alimentar las bacterias de la flora intestinal y coadyuvar a que la digestión sea más efectiva.
¿Qué remedios caseros le podemos dar a un perro para eliminar los gases?
La canela es uno de los ingredientes comunes en casa para las comidas dulces; esta además de ser rica y dar un toque más gustoso a los postres, contiene propiedades antiinflamatorias y antibacterianas, lo cual nos indica que se encargará de prevenir cualquier tipo de gases y al mismo tiempo, la mala digestión y detiene los espasmos musculares en el estómago de los canes. Para darlo solo basta con media cucharadita en un poco de agua, bien disuelta.
Por otro lado, hay algunas plantas o ramas que tienen también unas propiedades antiinflamatorias que sirven para tratar este tipo de situaciones. Puedes utilizar la manzanilla, cocinarla unos 15 minutos en agua para que suelte su sabor, luego dejarla enfriar y darle de tomar a tu canino dos cucharadas soperas de inmediato.
Al igual que la canela, la cúrcuma tiene efectos muy similares a ella. Debes colocar solo media cucharadita en un poco de agua y diluir por completo; después dársela a beber a tu can. Esto ayuda a acelerar la digestión, estimula la actividad estomacal y previene los gases.
¿En qué momento debemos acudir al veterinario por los gases de nuestro perro?
Cuando se noten los síntomas que ya se han mencionado, además de que hayas tratado de aliviar mediante el tratamiento médico y casero, y a pesar de ello aún se mantenga la situación igual o incluso vaya empeorando; aquí es el momento justo de ir al médico.
Puede ser que el caso sea más grave de lo normal y con lo que le has dado no ha tenido ningún significado y por tanto, se requiere de la atención de un especialista. El cual evaluará la causa que lo origina realizando estudios para diagnosticarla; una vez detectado el origen de ello, procederá a enviar un tratamiento y hará lo posible por aliviar de inmediato la afección. Así que debes ser paciente y además cumplir con la receta médica y los cuidados que proporcione el veterinario.
¿Hay algún riesgo en no atender a un perro que tiene gases?
Depende de la situación y la frecuencia de los gases. Hay ocasiones donde se convierte en algo difícil de controlar y se torna más habitual; por lo que el no tener un control sobre esto puede agravar la salud de tu perro, ya que en un principio el malestar le impedirá comer o beber cualquier cosa, por lo que se convertirá en desnutrición y deshidratación respectivamente.
También puede que el no atender dicho malestar, puede causar graves consecuencias donde está incluida la muerte, debido a que puede haber una obstrucción o torsión intestinal que sea la causa de esto y por ende, los gases sean un alivio. Sé consciente sobre esta afección estomacal y asegúrate de no poner en riesgo la salud del can, al contrario ayúdalo en lo que más puedas para que sane y atiéndelo de inmediato.
¿Existe alguna forma de prevenir que un perro sufra de gases abdominales?
Para prevenir las flatulencias en tu perro, necesitas considerar algunos aspectos y cuidar más de su salud. Lo indispensable es brindarle una dieta balanceada, con un alimento de alta calidad y que sea verdaderamente nutritivo, con componentes que su organismo pueda digerir fácilmente y logre estar sano.
Haz que coma de una forma moderada, donde le estimules a comer sin tanta prisa y acercarle el comedero más a su boca para que no entre tanto aire. También, trata de no servirle la comida diaria de una vez, sino dividirla en varias raciones (al menos 3) durante todo el día.
Evita que en las caminatas el canino coma cualquier sustancia que consiga en el suelo, lama su orina o se introduzca sus propias heces; esto evita a que no aparezcan parásitos ni se produzcan los gases en su interior.
Llévalo al veterinario para desparasitar cuando corresponda, realiza estudios de heces frecuentes donde se pueda comprobar que no hay ninguna anomalía, dile al veterinario que te recomiende alguna medicina preventiva para estas situaciones y mantén a la mano ingredientes caseros para tratarlo cuando se presenten.
Además, no lo dejes hacer ejercicio en momentos justo antes o después de que vaya a comer; así no tendrás problemas con su digestión ni tampoco aparecerán los gases.