¿Cuáles son los síntomas del seroma en perros? – El mejor tratamiento
Por seroma puede entenderse como un riesgo potencialmente mayor tras una intervención quirúrgica, una lesión o incluso una simple extirpación de tejido, viene a relacionarse con la acumulación de líquido subcutáneo no infectado y transparente. Por lo general, se forman como consecuencia de algún tipo de cirugía que crea un espacio muerto.
La magnitud de los seromas y la presencia de inflamación difieren, aunque por lo regular se manifiestan como un bulto blando e hinchado. El seroma se identifica fácilmente mediante una exploración física y acostumbra a presentarse en el lugar de la incisión quirúrgica que segrega un líquido claro.
¿Por qué se presenta el seroma en perros?
Se denomina seroma a la concentración de un líquido en el lugar de la incisión. Estos se producen a causa tanto del movimiento en la incisión de un perro inquieto como de una respuesta típica a las suturas disolubles empleadas en el cierre de la herida quirúrgica, esto quiere decir que se presenta en las zonas donde se extirpado el tejido cutáneo. A pesar que los seromas se asemejan a una hernia dentro de la incisión, el modo en que se cierran los puntos hace que las mismas sean muy poco usuales.
Además, los seromas en ocasiones cuando no se presentan complicaciones sanan de forma autónoma en el plazo de un par de semanas y no precisan cuidados. En general, los seromas se desarrollan en la zona próxima a la incisión quirúrgica y otras veces surgen poco tiempo después de la operación o semanas más tarde debido al espacio muerto o vacío que queda en el tejido extirpado.
Y se dice que se asemeja a una hernia es porque resulta de una pobre cicatrización de la incisión, por consiguiente, esa cavidad que queda hueca se llena del líquido seroso proveniente del daño producido en los vasos linfáticos tras la cirugía. Ante todo ello, se forma lo que hoy conocemos como seroma.
Este tipo de inflamación se da luego de operaciones tales como la extracción de tumores, hernias o masas de la pared abdominal donde se suele implicar muchas capas de piel y tejido, en estos casos, es común el desarrollo del seroma.
Otra causa potencial es cuando se incluyen tubos de drenaje para precisamente evitar una acumulación bajo la piel y se retiran antes del tiempo estipulado, esto deja la cavidad vacía en conjunto con restos de líquido que el tubo al ser retirado de forma precipitada, no alcanzó a drenar.
¿En qué consisten los principales síntomas del seroma en perros?
Es usual observar ciertos síntomas principales que nos advierte de la formación de un seroma en la incisión de nuestro canino.
Inflamación en la zona
Como se explicó anteriormente, los seromas son comunes y se suelen curar por si solos, pero al ocurrir una complicación, va ir aumentando su tamaño gradualmente, y va ser visible en el momento en que observemos una inflamación en la zona.
Piel enrojecida
Aparte de observar una inflamación en la zona, esta normalmente se presenta con un enrojecimiento a sus alrededores, lo que indica la gravedad del problema que se encuentra ante nosotros pues lo más probable es que se encuentre infectado.
Temperatura alta alrededor de la herida
Otra signo de severidad es que donde se denote dicho tono carmesí, la piel puede sentirse sensible y caliente al tacto, todo ello son indicaciones claras de infección.
Líquido transparente en la cicatriz
El seroma en sí es un bulto que se forma bajo la piel por una acumulación de líquido en la cavidad o espacio muerto tras la mala cicatrización, por ello, cuando este se encuentra infectado se produce la retención de pus o líquido que puede ser transparente, amarillo y blanco, en otras situaciones llamado liquido seroso. Se asemeja al que observamos cuando se forma una ampolla, cortes o lesiones.
¿Cuáles son los lugares dónde se puede presentar el seroma en perros?
Los seromas solo se originan en el tejido subcutáneo o bajo la piel, pues es allí donde se forma la cavidad vacía para su posterior acumulación de líquido seroso, no obstante, la podemos etiquetar como la zona más común puesto que en raras ocasiones se pueden producir, de igual forma, dentro de la cabeza, es decir, el cerebro, o de otros órganos del cuerpo e incluso los oídos. Ante ello, se resalta que los seromas se pueden presentar en cualquier lugar del organismo donde se haya realizado una extracción de tejido.
¿De qué forma se trata el seroma en los canes?
La forma en que se tratan los seromas coincide en gran medida del grado de acumulación de líquido. Es frecuente y natural que el cuerpo reabsorba un seroma, solventando el problema por sí mismo sin recurrir a un tratamiento.
A pesar de que los seromas de menor tamaño no son completamente reabsorbidos, casi nunca tienen un impacto significativo en la salud de la persona y no necesitan tratamiento. Por el contrario, los casos de mayor gravedad exigen una atención médica más intensa.
Realizando una extracción
Rara vez, el seroma no se resuelve pese a los distintos tratamientos aplicados, y por ello es preciso recurrir a una actuación quirúrgica ya que cuando un seroma de dimensiones considerables permanece sin tratamiento durante un período de tiempo prolongado, es posible que se produzca un recubrimiento delgado de tejido, conocido como cápsula fibrosa, en torno a la zona de la masa.
Dicha cápsula podría obstaculizar el drenaje íntegro del seroma e impulsar la rápida acumulación de líquido. Por lo tanto, antes de efectuar un drenaje constante, será necesario sugerir la extirpación quirúrgica de la masa.
Drenando el líquido
En caso de que la zona de masa afectada incremente su dimensión o manifieste cualquier indicio de infección a través de un enrojecimiento o la presencia de pus, entonces el profesional de la salud debe proceder a la evacuación del seroma empleando una aguja y una jeringa previamente esterilizadas, método que se conoce con el nombre de aspiración.
La aspiración del líquido seroso no se limita a afirmar el diagnóstico, sino que además consigue mitigar el dolor. En caso de que la primera aspiración logre drenar del todo el seroma, es posible repetir este procedimiento. Adicionalmente, se recomienda colocar vendajes en la zona afectada para disminuir la fuga linfática y prevenir una nueva acumulación de líquido.
¿Qué antibióticos se pueden administrar para tratar el seroma en perros?
Exponer unos antibióticos o antinflamatorios determinados resulta insuficiente pues cada veterinario dependiendo del estado de salud, gravedad del seroma y condición del canino, prescribirá los fármacos más adecuados. Aun así, se exponen dos tipos de antibióticos, los cuales poseen un amplio espectro y son comúnmente usados en lo referente a las infecciones bacterianas de la epidermis, ya que en el momento en que el seroma se infecta es debido a las bacterias que entran en la cavidad rellena del líquido seroso.
El primero es la amoxicilina combinado con el clavulanato, estos se trata de antibióticos afines a la penicilina que se emplean en el manejo de un extenso espectro de infecciones bacterianas, incluyendo infecciones de la epidermis, además del sistema respiratorio, gastrointestinales y genitourinarias.
Mientras que el segundo es el tetraciclina, capaz de abordar una serie de infecciones bacterianas puesto que impide la formación de proteínas. Este antibiótico se aplica en aquellos casos en los que otros no son efectivos porque posee la facultad de traspasar los límites de defensa utilizados por las bacterias para su protección.
¿Se puede curar un seroma sin necesidad de tratamiento?
Cabe la posibilidad de que se pueda curar un seroma pequeño sin la necesidad de un tratamiento, de hecho, la mayoría de los seromas de tamaño inferior suelen reabsorberse en un lapso de tiempo entre un mes hasta un año aproximadamente, todo por obra del organismo y eventualmente, desaparecer de forma natural.
Pero en dado caso, si los seromas incrementan su tamaño o salen infectados, quizá necesiten la intervención de un especialista en salud veterinaria.
Por lo que, de requerir la cura de un seroma con un considerable tamaño, no esperemos que desaparezca por sí solo, pues si se necesita aplicar un tratamiento, ya que nos enfrentamos a una capsula que va a permanecer hasta que se extirpe quirúrgicamente, o correr el riesgo de que la zona experimente un endurecimiento del tejido una vez que el seroma se cura.
¿Qué remedios caseros se pueden utilizar para tratar un seroma en perros?
Así como existen los fármacos tópicos también se puede hacer empleo de los remedios caseros u hábitos que si bien se utilizan con prudencia, puede ayudar más de lo que imaginas a reabsorber el seroma. Lo primero que vemos o notamos del seroma es que se muestra como un bulto, el cual lo podemos reducir significativamente aplicando frío y luego calor en la zona para aumentar la rapidez de curación.
Se puede optar por aplicar una almohadilla caliente durante unos 15 minutos en intervalos extensos de tiempo, lo que ayuda en el drenaje del líquido seroso, para poder proporcionar alivio al canino en la herida quirúrgica, también conocida como incisión.
Se debe tener en cuenta que el calor no debe ser muy intenso ni tampoco dejar tanto tiempo la almohadilla caliente, pues podría resultar contraproducente, y en vez de disminuir va a aumentar el líquido en el seroma.
Limpiar con peróxido de hidrógeno la incisión
Al igual que como ocurre cada vez que los humanos se lesionan y originan una herida, proceden a lavarse la zona afectada para evitar que se infecte, o si ya se encuentran infectados, se proceden a lavar con peróxido de hidrógeno y así, mantener la zona limpia, del mismo modo pasa con los caninos que poseen un seroma.
Y es que el peróxido está compuesto por hidrógeno y oxígeno, donde su combinación proporciona una fuerte oxidante que funciona como agente especializado de limpieza. Al verterlo en la zona infecta, este líquido al entrar en contacto con la piel se convierte en espuma por la enzima catalasa que lo compone.
Colocar hielo en la zona inflamada
Este remedio casero es de los más recomendados en la categoría de antinflamatorios naturales para los caninos, su procedimiento es muy sencillo, solo consiste en colocar una almohadilla o compresa fría en la herida infectada en un lapso de tiempo que oscile entre doce o veinticuatro horas, para luego colocar la almohadilla caliente como se expuso anteriormente, todo esto con el objeto de disminuir el bulto e hinchazón de la zona infectada.
Emplear una almohadilla fría o cubos diminutos de hielo en una zona infectada reduce considerablemente la inflamación e hinchazón, además como un plus, adormece el dolor que pudiese provocar el seroma, ya que el frío como tal, reduce los vasos sanguíneos y contrae la circulación en la zona.
¿Cómo se puede prevenir el seroma en los perros?
En términos generales, se debe iniciar por donde radica el seroma, es decir, justo después de que los perritos sean sometidos a una cirugía, por lo que al ser dados de alta por el veterinario, se debe tener sumo cuidado con las acciones post-cirugías, como lo es mantener comprensión o vendajes en la zona en donde se extirpó tejido, pues estos ayudan a mantenerla limpia y despejada de agentes bacterianos.
No solo eso, sino que de igual forma evita que la zona se estire y aumente el riesgo de la acumulación de líquido. En sí, se debe seguir las indicaciones que el veterinario sugiera, pues no existe una forma de evitar por completo la formación de los seromas.
En este sentido, también se puede inclinar por utilizar tubos de drenaje, para eliminar eliminar el exceso de líquido mientras se lleva a cabo la cura, claro está, estos deben aplicarse solo y exclusivamente cuando el canino se encuentre en el hospital. O que el veterinario mientras realiza la cirugía se encargue de cerrar los posibles espacios muertos o cavidades vacías, esto resultaría fenomenal ya que no daría lugar a la acumulación de líquido seroso.