Cómo puedo ayudar a mi gata a parir – Parto sin complicaciones
Cuando tenemos una gatita en casa y esta se encuentra embarazada, siempre vamos a querer ayudarla en todo para que el parto salga lo mejor posible. Más si se es un dueño primerizo, pueden surgir muchas dudas con respecto a cómo se debe actuar ante las diferentes situaciones que puedan presentarse y hasta del proceso como tal.
El parto es un proceso natural en los seres vivos, las gatas instintivamente son muy buenas madres, sin embargo siempre que haya un lazo de amor y confianza, un dueño puede participar y ayudar en el parto de una de estas pequeñas madres. En las siguientes líneas respondemos cada duda sobre cómo se debe ayudar a una gata al momento del parto.
¿Cuánto tiempo puede tarda una gata en parir?
Las gatas una vez pasan su periodo de celo y logran quedar embarazadas pasan por un tiempo de gestación de aproximadamente dos meses. Cuando esto sucede, las madres requieren más atención y mejores cuidados, el aumento de sus dosis de comida y la proteína del contenido, ya que no sólo ella se está alimentando, también sus crías.
Una vez se acerca el momento del alumbramiento las gatas pueden hallarse nerviosas, buscando lugares para tener a sus crías o llamando la atención de su dueño para que las ayude. La reacción de una gata va de la mano al lazo de confianza que haya creado con su amo.
El periodo de parto depende de varios factores para lograr calcular su tiempo, es determinante la cantidad de gatos que una gata pueda tener, ya que existen camadas de dos gatos hasta seis o siete. Naturalmente la dificultad, el lapso de descanso y dilatación entre cada gatito puede hacer que una gata demore más o menos que otra. Por ello se calcula de tres horas, hasta partos de 24 a dos días.
Cuando un parto demora demasiado es necesario prestar atención, ya que pueden estarse presentando problemas como baja dilatación o que una cría esté obstruyendo el conducto de salida. Este tipo de situaciones pueden ser determinadas por la actitud de una gata y como haya llevado hasta el momento el proceso de parto.
Muchas veces las gatas se demoran porque al salir una por una sus crías se detienen por además de cortar el cordón umbilical, a comer la placenta y a limpiarlo antes de seguir con el siguiente bebé, este proceso puede demorar de diez a veinte minutos en cada uno.
Es importante mencionar que la experiencia de una gata también juega una parte importante en el tiempo de parto, las gatas primerizas al verse por primera vez por este proceso, son menos precisas y más lentas que una gata con experiencia. Las gatas de raza pura pueden llegar a tener partos más difíciles y delicados que las gatas comunes, en estos casos se recomienda la supervisión de un veterinario.
¿Qué debes saber acerca del parto de una gata primeriza?
La actitud más notoria en una gata primeriza es el miedo debido a su inexperiencia, maullidos, ansiedad y las búsqueda constante de su amo, son de las acciones más comunes en ellas. Se han dado los casos en los que prefieren tener a sus crías arriba de la cama de su dueño para que así este las ayude en todo el proceso.
A pesar de la inquietud que pueden desarrollar las gatas primerizas, los instintos de estas siempre terminan aflorando, por tanto el proceso de parto sólo puede verse interrumpido por otro tipo de percances, como la obstrucción de algún bebé, dolores fuertes o hemorragias, estos casos sí deben ser atendidos únicamente por un especialista.
¿Cómo debo prepararme para el parto de mi gata?
Los cuidados que deben tenerse con una gata embarazada inician desde el conocimiento de su estado. Luego del celo y cuando comienza el periodo de gestación se notarán distintos cambios en el comportamiento de la gata, como un aumento del apetito, mayor tiempo en reposo y muy buen humor, principalmente focalizado en su dueño.
La dieta de una gata embarazada debe ser alta en proteínas y vitaminas, puede integrarse a esta dieta alimentos como las carnes ( Pescado, pollo, carne rojas) las cuales con su alto contenido de proteína animal ayudarán a fortalecer las defensas de la minina, otro alimento recomendable es la espina, su alto contenido de hierro ayuda a mantener fuerte la hemoglobina en las mascotas.
El uso de vitaminas como el ácido fólico, el omega 3 y la vitamina C también son buenas contribuciones para el cuidado de una gata embarazada. En este lapso de tiempo se notará la necesidad afectiva que esta requiera con su dueño, el formar un lazo con nuestra mascota ayuda a que en el proceso de alumbramiento la ayuda sea mejor recibida.
Visita al veterinario
Las visitas el veterinario son esenciales, sobre todo si se desconoce el modo de actuar de una gata, esto debido a que sea primeriza o la primera vez que se presencia este estado de la mascota. Los médicos pueden supervisar el estado de las crías desde muy temprana edad, determinando así las posibles complicaciones que puedan darse.
No necesariamente un parto debe complicarse, pero la mejor forma de poder determinar que todo marcha de la manera correcta es por medio del diagnostico médico, situaciones como incorrecto desarrollo de las crías, déficit en la alimentación de la madre o problemas congénitos son comunes en los partos felinos, más con la correcta gestión del proceso se puede llegar a un desenlace satisfactorio para el dueño y los gatos.
Cuida su alimentación
Como anteriormente se nombró, la alimentación de una felina embarazada es uno de los cuidados principales que deben brindarse. No se recomienda la integración de comida principalmente vegetal, esto se debe a que los gatos son seres carnívoros que requieren dentro de su alimentación diaria sustancias como la taurina y la proteína.
La dosificación es importante. Un gato normal come al rededor de tres veces diarias en dosis no muy grandes para mantener un peso balanceado, una gata embarazada requiere suficiente alimento para mantenerse fuerte y prepararse para el momento de dar a luz al mismo tiempo que sus crías se desarrollan dentro de ella. La frecuencia requerida se encuentra entre las cuatro o seis dosis diarias. Es normal el aumento de peso en una gata embarazada.
Espacio para el parto
Entre más cercano se encuentre el momento de dar a luz, más ansiosa se encontrará la gata. Probablemente faltando entre una o dos semanas para el alumbramiento se le verá en busca de un lugar cómodo para cuidar a sus cachorros, las gatas que ya hayan tenido camadas y tengan confianza con sus dueños, probablemente buscarán avisar que se acerca el momento de que se le prepare un espacio para ellas y las crías que vienen en camino.
El espacio que debe brindársele a estas criaturas se debe ubicar en lugares poco concurridos del hogar, además deben ser lo suficientemente cálidos, secos y oscuros para que la gata pueda sentir que es un nido correctamente preparado para ella.
Una vez haya sido electo el lugar en donde se encontrará la nueva familia, este debe ser provisto de ciertas comodidades. Las cestas y cajas de cartón son buenas opciones a la hora de armar el rincón para los gatitos. Dentro de ellas debe acomodarse papel periódico y mantas limpias que brinden calor y comodidad tanto a las crías como a la madre.
¿Cómo ayudar a mi gata durante su parto?
Por más nerviosas que estén las gatas, estas mediante a sus impulsos instintivos sabrán que hacer para tener de forma correcta a sus bebés, mientras ella y las crías se encuentren saludables y gocen del un lugar correctamente preparado, limpio y tranquilo para llevar el proceso, no requerirán ayuda durante el parto. Sin embargo pueden hacerse algunas recomendaciones al respecto.
Mantén tu distancia
Es importante dejarle el control del parto a la gata, es cierto que este tipo de situaciones ponen nerviosos a todos los miembros de la familia. Pero es un proceso natural, el cual preferiblemente debe ser llevado sólo por la madre.
Una gata en mitad del proceso de alumbramiento puede sentirse incómoda con la presencia y manipulación constante de su dueño, existen casos en donde por el contrario agradecen esta ardua ayuda, más una gata se comunicará de forma evidente si realmente requiere intervención. Signos de que una gata desea la ayuda de su amo durante el parto:
- Busca estar encima de su dueño.
- Maúlla consecutivamente en busca de atención.
- No entra al nido.
Y a pesar de que estas situaciones se den y una gata se encuentre muy asustada, lo mejor es calmarla, hacerla sentirse cómoda y procurar no entorpecer el momento en el que ella se encuentre teniendo a sus crías.
Señales de parto inminente
Cuando se aproxima el parto de una gata, pueden observarse distintas señales demuestran que ya es la hora de que salgan los bebés. Uno de los primeros signos es la disminución de la temperatura, generalmente los gatos se encuentran entre los 38 o 39 grados, más una gata embarazada a punto de iniciar el proceso de alumbramiento puede encontrarse con una temperatura de al menos unos 36 grados.
Las bajas de tensión son bastante comunes, por eso se recomienda prestar atención a la nutrición y reforzamiento de una felina, así estará lo suficientemente fuerte para resistir el trabajo que requiere dar a luz. Si una gata se descompensa hasta el nivel del desmayo es necesario llevarla de forma inmediata el veterinario.
Otra muestra de que el trabajo de parto comienza es la secreción de sangre y otros fluidos por la vulva, esto probablemente venga acompañado de contracciones y como repuesta natural, la respiración y pulso de la gata deberán acelerarse, esta buscara limpiarse de manera repetitiva la vulva y además se acomodará reiteradas veces en el nido, en busca de la posición más cómoda para tener a sus crías.
Comienzo del parto
El comienzo del parto se da e penas la gata entre en labor, las contracciones abdominales y la liberación de fluidos por parte del útero son los primero pasos que dan comienzo a la salida de las crías, conforme las contracciones se hacen más fuertes los bebés irán saliendo por el conducto uterino.
Estos se hallarán recubiertos de la placenta en donde se desarrollaron durante los meses de gestación y seguirán atados a su cordón umbilical. El nacimiento de los gatos es individual, separados cada uno por su placenta. Entre cada cría, la madre se toma el tiempo de limpiarlos mientras se da un descanso para continuar con su labor hasta terminarla.
Los gatitos y placentas
Los intervalos donde nace un gatito se dan por medio de contracciones fuertes que ayudan a que este sea expulsado del conducto uterino, cuando salen se encuentran cubiertos por la placenta, esta aunque luzca mal para los humanos, debe ser consumida por la madre.
Esta conducta no es simplemente un acto trivial gatuno, pues el contenido nutricional que porta la placenta es altamente rico en nutrientes y proteínas que sirven para darle fuerzas durante todo el proceso. Además también como reserva luego de terminar el parto y requerir amamantar a sus crías, las cuales también reciben las bondades de todos los nutrientes que consume la madre.
El cordón umbilical
El cordón umbilical felino funciona al igual que el humano, los gatitos de forma individual se encuentran conectados a su madre y mientras se desarrollan dentro de ella absorben por medio de este, todo los nutrientes que necesitan para formarse y sobrevivir, una vez fuera del útero materno este ya no es necesario, por lo que su madre lo corta con sus dientes y se lo come.
¿Qué debo hacer después del parto de mi gata?
Una gata recién parida se encuentra exhausta, por más que esta pueda tomarse distintos descansos entre cada cría, la jornada de un parto no termina hasta que salga el último gatito. Cuando esto sucede lo más probable es que aún esta siga trabajando en el confort de sus crías y descanse sólo cuando sienta que ya todo ha sido ordenado y sus hijos se encuentran totalmente limpios.
En esos momentos, un dueño debe mantener distancia, la gata debe sentirse libre e independiente, capaz de tomar sus propias decisiones, encontrándose serena y a solas con sus crías. Lo que sí debe hacerse es ofrecerle alimento y agua, ya que es probable que debido al desgaste se encuentre deshidratada y débil. No es tarea fácil traer vidas al mundo…
Si la zona del parto se encuentra muy sucia, es posible limpiar un poco con un trapo, sin usar limpiadores con olores fuertes que puedan turbar la estadía de la nueva familia. Es buena idea acercar los elementos esenciales en la vida de la gata, además de los depósitos de comida, también su arenero, para que de esta forma no deba alejarse mucho de sus crías.
Luego de disponer todo, un dueño puede mantenerse atento a lo que requiera la gata y sus gatitos, pero manteniendo una distancia prudencial y permitiendo que esta logre sentirse retirada y segura en su nido. Por ello el lugar en el que harán vida durante su periodo de lactancia debe encontrarse en un punto solitario y tranquilo del hogar.
¿Cómo saber si mi gata no puede o se le complica parir?
Existen diferentes muestras de una complicación, entre las más evidentes se encuentra la imposibilidad de expulsión de alguna cría. Esto es debido a que pueda encontrarse en una mala posición o ser muy grande para salir, también si la cría está muerta o las contracciones son muy débiles puede suceder esto.
Para determinar este suceso debe esperar un tiempo de al menos cinco horas, ya que no se puede contabilizar de manera exacta cuanto tarda una cría en salir, ni todas demoran lo mismo.
Otro signo importante es el sangrado, de manera natural se expulsa por la vulva un pequeño sangrado constante, pero si este se observa abundante y parece no parar luego de todo el parto, se debe acudir al médico, ya que es probable que se haya presentado alguna ruptura o desgarre y haya una hemorragia.
Si la gata palidece y se encuentra demasiado débil para atender a sus crías, su dueño debe procurar prestarle ayuda, si sólo presenta una baja de tensión podría recuperarse rápidamente, más si esta reacción se debe a otro suceso seguramente se requerirá un especialista para tratarla.
¿Cuáles son las complicaciones que puede tener mi gata en su parto?
Muchos inconvenientes pueden presentarse a la hora de un parto, este tipo de procesos a pesar de ser naturales, vienen siempre con una alta probabilidad de sorpresas. Por esas razones se recomienda la asistencia médica durante el embarazo, de esta forma puede monitorearse y adelantarse a diferentes situaciones que se dan durante los nacimientos felinos.
La posibilidad de que alguna cría muera es un evento bastante común, muchas veces debido a partos de gran número en donde no todos los fetos hayan podido nutrirse de la manera correcta y mueran en el alumbramiento. Existen otro tipo de complicaciones que pueden darse durante un parto y son:
- Enfermedad de la gata.
- Muerte de un feto.
- Hemorragias.
- Enfermedades congénitas.
- Obstrucciones.
Ciertamente hay muchas situaciones que pueden presentarse y complicar un parto, más si un dueño lleva el cuidado correcto y las visitas al médico necesarias, es probable culminar todo el proceso de manera optima. El tiempo de gestación y el momento de dar a luz son eventos delicados en la vida de un gato doméstico, por lo tanto un dueño bien informado es uno de los factores más importantes para la finalización exitosa de todo el acto.