Cómo aparece la hidrocefalia en perros – Causas, síntomas y tratamiento
La hidrocefalia es una afección que causa una acumulación del líquido cefalorraquídeo en los ventrículos del cerebro causando que aumenten su tamaño y dañando el exterior que entra en contacto con la cavidad craneal, principalmente ocurre por anomalías genéticas, pero también puede ocurrir por tumores, lesiones, o infecciones que pueden afectar al cerebro; es importante saber que esta enfermedad tiene más probabilidades de ocurrir en unas razas que en otras.
¿Qué es lo que provoca que un perro sufra hidrocefalia?
La hidrocefalia ocurre en la mayoría de los casos por defectos congénitos, aunque un porcentaje importante de los casos son adquiridos luego de algún traumatismo en la cabeza; otro motivo que puede causar la acumulación de líquido cefalorraquídeo es la formación de tumores cerebrales o puede ser el resultado de enfermedades ocasionadas por diversos virus que pueden afectar dicho órgano.
¿Qué perros son más propensos a padecer hidrocefalia?
Hay razas caninas que tienen más predisposición y probabilidad de desarrollar hidrocefalia, principalmente las razas pequeñas como los chihuahuas, el pug carlino, maltés, yorkshire, ihasa apso y Pomerania entre otras de poco tamaño mejor conocidas como perros ‘Toy’.
Síntomas más frecuentes en los perros con hidrocefalia
La acumulación de líquido cefalorraquídeo es más común en cachorros que en adultos debido a que la mayoría de los casos son congénitos; hay diferentes señales que pueden darnos sospechas de que nuestro canino padece esta afección.
Si notamos que nuestro perro tiene la cabeza hinchada, convulsiona, tiene ceguera total o parcial, camina en círculos o se moviliza sin coordinación puede tratarse de una hidrocefalia, también suele causar la desviación de uno de los ojos o ambos (estrabismo) y las fontanelas permanecen abiertas.
En los casos más radicales el perro puede entrar en un estado vegetal o en coma porque el cerebro no funciona correctamente; hay que tener en cuenta que existe un tipo de hidrocefalia llamada ‘sub clínica’, en este tipo no se presentan síntomas
¿De qué forma se diagnostica la hidrocefalia en los perros?
La hidrocefalia se diagnostica mediante radiografías, ecografías, tomografías o resonancias magnéticas en la zona craneal, dependiendo de cada caso en particular el veterinario escogerá la mejor opción para realizar los exámenes. Debido a que puede ser adquirida por otros motivos como traumatismos o enfermedades infecciosas o virales, el veterinario realizará exámenes adicionales para encontrar correctamente la causa.
¿Cómo es el tratamiento que llevan los perros que tienen hidrocefalia?
El tratamiento de la hidrocefalia es delicado, está enfocado principalmente en controlar la presión interna del cráneo disminuyendo la producción de líquido cefalorraquídeo, también se suministran diferentes fármacos como ‘diuréticos’ y ‘cortico-esteroides’ para apaciguar los síntomas; en los casos más radicales hay que recurrir a cirugía para colocar un drenaje de líquido.
¿Qué cuidados debemos tener con los perros que padecen hidrocefalia?
Debido a la gravedad de esta afección debemos tener ciertos cuidados para mejorar la calidad de vida del canino en lo posible y evitar empeorar la hidrocefalia, hay que limitar la movilidad del animal para evitar hacerlo realizar ejercicios para que gaste energía o movimientos bruscos y tratarlo con delicadeza al manipularlo principalmente en el cráneo.
Debemos evitar el uso de collares, hay llevar un control estricto del desarrollo de esta y otras enfermedades llevándolo regularmente al veterinario; además se aconseja tener las vacunas al día, desparasitarlo y ofrecerle suplementos alimenticios que potencien las funciones cognitivas.
¿Cuál es la esperanza de vida de los perros que sufren hidrocefalia?
En el caso de los cachorros con hidrocefalia congénita la esperanza de vida es corta, la mayoría fallecen siendo cachorros aun, ya que no tiene cura, igualmente se les brinda tratamiento para suavizar los síntomas; el pronóstico de vida depende de qué tan grave sea la lesión en el cerebro, si se trata a tiempo el perro puede salvarse aunque en la mayoría de los casos presentan secuelas como fallas en la coordinación y problemas de aprendizaje.