Cómo medir la temperatura de un gato – Guía para fiebre y temperaturas bajas

Los gatos son mascotas bastante demandadas en todo el mundo y se distinguen por su excéntrico carácter así como sus habilidades de equilibrio, pero ¿qué pasa si nuestra querida mascota comienza a mostrarse fatigado y sospechamos que tiene temperatura? En este artículo encontrarás toda la información que necesitas saber para saber si tu gato tiene fiebre.

¿Cuál es la temperatura ideal de los gatos domésticos?

Antes de averiguar si nuestro gato tiene fiebre, naturalmente necesitamos saber cuáles son los valores normales en un gato. Los gatos adultos suelen manejar temperaturas normales más altas que los humanos y oscilan entre los 38 y los 39,1°C.

Para el caso de los gatitos bebés, esta temperatura es más baja, 37°C, esto se debe a que su organismo aún es joven y no controla la temperatura corporal, con el paso del tiempo se irán regularizando a lo normal. Es vital que sepamos que la temperatura de 37°C es solo normal en la infancia, ya que un gato adulto con dicha temperatura podría morir de hipotermia.

Factores que pueden interferir en la temperatura corporal de un gato

Hay diversos factores que pueden cambiar la temperatura de un gato, por ejemplo el factor ambiente: como pasa en los humanos, las altas temperaturas del ambiente pueden ocasionar en nuestra mascota un aumento en su temperatura corporal, provocando que “se acaloren”.

No nos deberíamos preocupar mucho en este aspecto, pues son los mismos gatos quienes buscan un lugar más fresco cuando se sienten acalorados.

Debemos tener en cuenta que aunque los gatos se mueven por su cuenta hacia lugares más frescos o cálidos, ello no los exenta de sufrir golpes de calor o hipotermia. Cuando un gato está bajo temperaturas extremas,  podemos verlo exhibir ciertos comportamientos.

A temperaturas altas se les ve respirar con la boca abierta, en esta situación debemos tomar medidas para evitar un golpe de calor que pueda resultar mortal, ventilación y agua son tus mejores opciones.

¿De qué forma puedo tomarle la temperatura a mi gato?

La única forma de saber la temperatura de nuestro gato es mediante la ayuda de un termómetro. Es normal escuchar un mitos que circulan sobre el uso de las orejas y nariz para determinar la temperatura pero no tienen ninguna base ni efectividad.

La forma más segura para tomarle la temperatura a un gato es con un brazo contra el pecho, con nuestra mano mantener elevada la cola y cuerpo para impedir que se siente y con la otra mano introducimos el termómetro en su recto lo suficiente como para cubrir la punta del termómetro previamente lubricado.

Lo normal es que el gato oponga resistencia, por lo que necesitaremos la ayuda de otra persona, aunque también podemos optar por envolver en una toalla al gato, dejando libre solo la parte posterior del gato. Si el gato aún opone demasiada resistencia será necesario llevar al veterinario para evitar lastimarlo.

Si lográramos tomar la temperatura a nuestro gato por nuestra cuenta, solo sería cuestión de observar los valores obtenidos que si exceden los estándares de normalidad estaría indicando que efectivamente nuestra mascota tiene temperatura.

¿A qué temperatura ya se considera fiebre en un gato?

Se dice que un gato tiene temperatura alta, también conocida como hipertemia, cuando su temperatura corporal es mayor a los 39,2°C.

Si ya tomaste la temperatura de tu gato y resulta ser mayor a 39,2°C lo mejor es que acudas lo pronto con un veterinario antes de que el estado de salud de tu mascota empeore.

¿Cuáles son los síntomas de la fiebre en los gatos?

Existen varios síntomas que nuestro gato puede presentar cuando está enfermo de fiebre, a continuación los síntomas más comunes de gatos con fiebre:

• Nariz reseca: cuando los gatos tienen fiebre, su nariz se torna reseca y caliente
  Cambios en su comportamiento: los gatos con fiebre se ven inquietos sin alguna razón aparente. Probablemnete encuentres que tu gato está triste y no quiera jugar contigo.
• Respiración y latidos de corazón: cuando un gato padece temperatura su corazón se suele acelerar y por consecuencia su respiración se nota más agitada.
• Higiene personal: los gatos son animales muy limpios, si notas que empieza a descuidar su aseo personal deberías prestar más atención  a tu mascota, puedes puede tratarse de un indicativo de que tu gato está enfermo.

¿Qué debo hacer para bajar la fiebre a mi gato?

Mantén a tu gato hidratado, si se niega a beber agua te puedes ayudar con una jeringa para introducirle el agua por la boca, este proceso debe ser hecho con cuidado.

En un momento así, proporcionarle alimentos ricos en nutrientes para que su organismo se mantenga fuerte es importante. Presta atención a la consistencia de sus heces fecales y opta por la dieta húmeda durante su proceso de enfermedad.

Al igual que las personas cuando están enfermas, un gato requiere reposo, por lo que un lugar acogedor y tranquilo le vendría bien. Si su fiebre es muy fuerte puedes humedecer ligeramente la superficie de una toalla con agua fría y colocarla sobre su frente por un par de minutos.

Posteriormente retira la toalla y aplica sobre esta misma técnica otra vez sobre su abdomen y patas, teniendo especial cuidado ya que a los gatos no les gusta que les toquen sus patas; este proceso se puede repetir 2 veces al día.

Otra opción puede ser colocar un ventilador para que el aire fresco lo ayude, siempre cuidando que el aire no le pegue de forma directa y que la velocidad del motor sea moderada baja.

¿Cuáles son las causas más comunes por las que un gato puede tener fiebre?

Debes saber que algunas de las causas de que tu gato tenga fiebre son muy leves y otras representan un riesgo  de muerte para la vida de tu mascota, a continuación una lista de las patologías habituales en donde la fiebre está presente:

• Presencia de tumores (común en gatos viejos).
• Infecciones fúngicas de carácter leve.
• Enfermedades virales o bacterianas.
• Gripe.
• Traumatismos.
• Pancreatitis.
• Efectos secundarios ocasionados por la ingesta de medicamentos para humanos.

Si la temperatura de tu gato supera los 41°C no debes esperar más, acude lo más pronto posible con el veterinario para que lo examine y pueda ofrecerte un tratamiento que ayude a controlar la fiebre en tu mascota.

¿Qué puedo hacer si mi gato tiene la temperatura baja?

Primero debemos saber cuándo se considera que un gato tiene temperatura baja. Se dice que cuando la temperatura corporal del gato es igual o menor a 37°C su salud está en riesgo, ya que puede sufrir algo conocido como hipotermia en gatos, es necesario saber cuando tu gato tiene frío.

En la hipotermia en gatos el organismo consume la energía acumulada y los niveles de azúcar en sangre se disminuyen, lo que provoca una reducción sustancial en el metabolismo que puede desembocar en un paro cardíaco.

A continuación te presentaremos una lista de opciones que puedes realizar para tratar de evitar la hipotermia en tu gato:

• Envuelve a tu mascota con una manta o prenda que de calor.
•  colócalo en lugares cálidos como por ejemplo dentro de caso y de ser posible cerca de una chimenea con fuego.
• Puedes administrarle una solución como agua con azucar o miel con agua tibia, para evitar que sus niveles de azúcar caigan
• También puedes colocar botellas con agua caliente, antes corrobora el calor de dichas botellas para evitar quemaduras en tu mascota.

La hipotermia en gatos suele ser ocasionada por una exposición a agua fría aunque también sucede después de que un gato tiene un shock. En gatitos bebés la hipotermia también puede suceder si la temperatura ambiente no es adecuada.

Recuerda que en estos casos recomendamos acudir a un veterinario lo más pronto posible, en caso de no poder costearlo te recomendamos contactar a una sociedad protectora de animales.