Mi perro sangra por la nariz – Causas, cómo identificarlo y detener la hemorragia
Las principales causas por las que un perro sangre por la nariz; es debido a una infección que pueda presentar, o quizás algún tumor o algo relacionado con cuerpos extraños en la parte de la cabeza o algún vaso de la nariz. Lo correcto es llevarlo al veterinario lo más pronto posible si el sangrado es abundante y siempre persiste para realizar exámenes que indiquen que es lo que le causa eso.
¿Cuáles son las causas más frecuentes por las que los perros sangran por la nariz?
Existen muchas causas probables que permiten que exista este sangrado en el perro. Entre las más frecuentes están: El golpearse la nariz, pues permite que este sangre debido a lo frágil que son los vasos sanguíneos que allí se encuentran. Además llevar un golpe muy fuerte puede causa una fractura en la nariz y en consecuencia sangra.
Las infecciones causadas por bacterias u hongos (que necesiten tratamiento antibiótico), y permiten que inicie el sangrado en la nariz debido a las secreciones que tiene en la nariz con la mucosidad.
Infecciones
Cuando hay infección en los perros, esta puede manifestarse con un sangrado por la nariz. Algunas pueden ser: rinitis, causa estornudos; y luego procede a sangrar. Un absceso en la dentadura también es parte de las principales infecciones.
Cuerpos extraños
Esta es una de las causas probables por las que el perro sangra por la nariz la cual puede estar sujeta a algunos cuerpos extraños que puedan alojarse dentro de la nariz del canino. Estos pueden ser: hojas, polvo, huesos pequeños o trozos de madera, en algunos casos semillas.
Se debe tener en cuenta que la hemorragia nasal es peligrosa si no se detecta a tiempo lo que la causa. Una obstrucción nasal de mayor medida genera tumores que pueden causar la muerte del perro.
Coagulopatías
La coagulación en la sangre se debe a las plaquetas presentes en esta. En caso de que exista una mala coagulación de la sangre hay peligro de presentar hemorragias espontáneas. Muchas veces la causa de estas fallas en la coagulación al ser espontanea puede ser un envenenamiento.
Otra causa es una deficiencia en la vitamina K. De tal manera implica que se debe medicar con vitamina K la cual evita que la coagulación empeore, pero esto siempre debe hacerse por recomendación veterinaria, no automediques a tu perro. Siempre es recomendable fortalecer el sistema inmunológico de los perros para evitar que los sangrados nasales.
Pólipos y tumores
Muchas veces los pólipos nasales son bultos que están en la mucosa de los perros y esta puede convertirse en una carnosidad que implica inflamación. Finalmente pueden causar infección en el perro. Esto causa que sangre debido a que obstruyen directamente los senos para nasales, los irrita y lastima las venas de la nariz.
Mientras que los tumores se presentan muchas veces por no detectar a tiempo alguna enfermedad que haya presentado el animal en la nariz. Y con el tiempo se va desarrollando un tumor que puede generar cáncer en el perro. Lo que puede necesitar quimioterapias y en algunos casos cirugía.
¿Qué enfermedades caninas pueden producir hemorragias nasales?
La leishmaniosis es una enfermedad canina y afecta al animal debido a la picadura de un mosquito el cual está contagiado y este la transmite al perro. Por tanto el perro que tenga esta enfermedad empieza a producir una hemorragia nasal incluso mensual; para detectarla se debe hacer exámenes de sangre al perro. Otra enfermedad es la llamada epistaxis es la más común, ya que ella procede de los vasos sanguíneos de las fosas nasales.
¿Cómo puedo detener la hemorragia de la nariz de mi perro?
Lo primero que se debe hacer es mantener la calma. Aplicar hielo o agua fría en la nariz puede evitar que la hemorragia siga. Acude al veterinario de inmediato, lo mejor es que un profesional lo trate y determine la causa de la hemorragia.
¿De qué forma se lleva a cabo el diagnóstico del origen de la hemorragia?
En caso de que el sangrado sea intenso, lo mejor es acudir al médico veterinario para hacer un descarto definitivo del porqué existe sangre. Esto puede diagnosticarse apoyándose de otros síntomas como: mareos, presión arterial baja-alta, palidez, poco apetito, dificultad para respirar, debilidad y otras más.