¿Cómo se si mi perro tiene otitis? – Causas, síntomas y tratamiento

La otitis o inflamación del oído constituye una de las razones más corrientes según las cuales los cuidadores de perros acuden al veterinario. La comprensión de la misma en conjunto con sus factores causantes y agravantes son un importante punto de partida para el éxito del diagnóstico, por consiguiente, el tratamiento.

¿Qué causa que un perro padezca de otitis?

La otitis forma parte de las enfermedades auditivas, deben  presentarse por causas serias pues un conducto auditivo saludable es muy resistente a las infecciones, por lo que algo tiene que ir verdaderamente mal para que se produzca dicha inflamación de los conductos auditivos. En este sentido, las causas son diversas entre los factores o agentes causantes están: alguna anomalía o predisposición de la raza del perro, así como un agente fisiológico y/o ambiental.

Causas primarias

Entre las causas primarias se distinguen las alergias, las anomalías hormonales, presencia de cuerpos u objetos extraños, parásitos tales como los ácaros y las pulgas, exceso de producción de aceite, traumatismos ya sea por golpes accidentales o peleas provocadas, trastornos de la formación de la piel como la seborrea, y en el peor de los casos, existencia de tumores en los canales auditivos de estos caninos.

Causas perpetuantes

En el oído se albergan microorganismos que ante una mala higiene o exposición a ciertos detonantes se puede producir o desarrollar infecciones en los canales auditivos, entre los que se destacan las levaduras o las bacterias.

Factores que pueden predisponer

Tal como se mencionó anteriormente, existen factores que pueden predisponer al padecimiento de esta enfermedad, como lo son los factores genéticos o fisiológicos, en estos casos es normal observar que los perros presenten abundante producción de cera, almacenen muchos residuos (exceso de pelo en los canales auditivos) o estén expuestos la mayoría del tiempo a la humedad (orejas caídas).

Del mismo modo se infieren los factores ambientales favorables a las infecciones, los cuales incluye a los perros que nadan con frecuencia, donde la humedad o el agua estancada les producen en consecuencia la característica inflamación del odio.

¿Cuáles son las razas de perros más propensas a padecer otitis?

Algunos perros como los Labradoodles, Goldendoodles, los Caniches y mezclas de los mismos representan unas de las razas más propensas a padecer esta enfermedad debido a su abundante cantidad de pelo en los conductos auditivos que predispone al estancamiento de residuos y humedad.

Entre los perros que es frecuente observarles las orejas caídas figuran los Bulldogs, Bloodhound, Cocker Spaniel, Golden Retrievers, Labradores, Beagles, Basset Hound, Gran Danés, y los Dachshund.

Tipos de otitis que pueden padecer los perros

Los tipos de otitis se clasifican en función del nivel de oído perjudicado, o de si la infección debido al tiempo se ha extendido, volviéndose de superficial (parte externa del oído) a un poco más profunda (parte  interna del oído).

Otitis externa

La otitis externa canina es un trastorno dermatológico recurrente en la mayoría de los perros. Las orejas perjudicadas hacen que simples actos como sacudir la cabeza o rascársela se presente con frecuencia doloroso y pruriginoso; en caso de que la afección se vuelva crónica, es más difícil de controlar. Por lo tanto, las causas primarias del problema del oído deben ser identificadas, eliminadas o manejadas.

Esta forma de otitis constituye, igualmente, un trastorno multifactorial donde su principal causa es la alergia, que suele ir acompañada de infecciones microbianas.

• Otitis aguda externa: Aparecer como un comienzo agudo por el aumento de sacudidas de la cabeza, rascado e inflamación durante alrededor de varios días. Algunos casos pueden ser muy dolorosos, y el canal auditivo puede ser edematoso de la inflamación.
• Otitis crónica externa: Esta ha estado presente durante al menos 1 mes desde que hizo su aparición la enfermedad o se empezó a manifestar los síntomas. El tratamiento de los casos crónicos siempre es más difícil, pues si la causa primaria que le subyace no se aborda adecuadamente, la resistencia a los medicamentos antimicrobianos y/o cambios patológicos progresivos pueden resultar no reversibles.

Otitis media

Este nivel de otitis ya es un poco más avanzado pues se encuentra afectado el oído medio, es decir, esa parte del oído que se ubica detrás del tímpano. En estos casos es notable la pérdida de la audición, además puede acarrear otros problemas en otras partes del cuerpo como la ausencia de equilibrio, parálisis faciales, y afectar la visión.

Otitis interna

Ultimo y más peligroso nivel de la otitis, la enfermedad ya se encuentra en su punto final donde la gravedad es alta, lo que ocasiona en consecuencia, la pérdida total de la audición y equilibrio, los perros en esta situación se ven incapaces de dar un paso, conocido en términos científicos como ataxia canina.

Síntomas que se presentan en los perros con otitis

La infección de oídos es un proceso doloroso, por ello se encuentran reacios a dejar que les revisen sus oídos, y pueden mostrarse irritados o depresivos debido a la misma enfermedad. A menudo, los perros sacuden mucho la cabeza y se frotan las orejas buscando aliviar las molestias. Las orejas con frecuencia se enrojecen e inflaman y desarrollan un olor desagradable.

Por lo general, se presenta una supuración negra o amarillenta. Si se trata de un caso crónico, las orejas pueden parecer costrosas o engrosadas y los conductos auditivos suelen estrecharse (estenóticos) como producto de la inflamación crónica.

¿De qué manera se lleva acabo el diagnóstico de la otitis en perros?

El diagnóstico de la otitis requiere una minuciosa revisión, incluye un examen exhaustivo de los canales auditivos, el cual puede resultar muy doloroso, por lo que se recomienda la sedación o la anestesia en el momento de llevarlo a cabo, y por último, una valoración citológica. También es factible tomar muestras de los restos del canal auditivo para realizar un cultivo de bacterias y hongos, recomendados cuando se sospeche de una otitis media o interna.

El análisis de imágenes como la tomografía computarizada o la radiografía son útiles para evaluar el grado de mineralización del cartílago en el conducto auditivo externo o la destrucción ósea en el oído medio, así como también, los defectos de los tejidos blandos, y para determinar si es necesaria la intervención quirúrgica.

Si bien los hallazgos radiográficos pueden ser falsamente negativos, las radiografías también pueden ser una alternativa eficaz en cuanto a costes en la práctica general. Una otoscopia ayuda a posibilitar la verificación de la cantidad y la consistencia de la cera o, en su defecto, la secreción del oído, algunos cuerpos extraños y/o masas, además del grado de inflamación y estenosis.

En la medida de lo posible, es necesario evaluar la membrana timpánica para detectar cualquier cambio, tales como la opacidad o perforación. La examinación del oído con tinción diff-quik resulta una opción interna eficaz y rápida para verificar cualquier tipo de infección y grado de inflamación.

¿Cómo es el tratamiento que deben seguir los perros que tienen otitis?

La mayor parte de los casos de otitis externa se puede manejar adecuadamente con la terapia tópica; sin embargo, es probable que la otitis regrese después del tratamiento si no se aborda el factor subyacente.

Este tratamiento debe realizarse con un mínimo de residuos en el conducto auditivo; por ello, el exceso de residuos debe eliminarse mediante un lavado profundo del oído. Si los conductos auditivos están muy inflamados, los expertos recomiendan un tratamiento previo con fármacos anti-inflamatorios previo al lavado.

Tras el éxito del tratamiento de una infección e inflamación del oído, la práctica de una limpieza periódica del oído en casa, aproximadamente cada siete a catorce días, puede ayudar a reducir la acumulación de material auricular y la reaparición de infecciones.

Los limpiadores de oídos han de tener diferentes propiedades, ya sea secantes, antisépticas y/o cerumenolíticas, deben seleccionarse en virtud de las necesidades específicas y las indicaciones del veterinario.

En algunos perros, las infecciones de oído son una consecuencia de las alergias alimentarias. En este caso, el veterinario puede recomendar una dieta especial con receta para ayudar a determinar si las alergias alimentarias están contribuyendo a ello.

¿Qué puedo hacer para prevenir que mi perro padezca de otitis?

Si tienes algunas de las razas de perros propensos a padecer otitis debes realizarles con frecuencia el cepillado o desplume de los pelos en su canal auditivo. Y en términos generales, es necesario para todos los perros en general una limpieza regular, sin utilizar alcohol, peróxido de hidrógeno o aceites esenciales en los oídos, pues pueden resultar muy abrasivo para el revestimiento del canal auditivo. También el revisado frecuente de oídos en busca de exceso o tacos de cera puede prevenir en gran medida la aparición de esta enfermedad.

Errores más frecuentes que cometen los dueños con los perros que tienen otitis

Es usual que los dueños no le presten la suficiente atención, y de hecho, cuando se prolonga las infecciones de oído, el canal auditivo puede sufrir cambios severos e irreversibles, sin un tratamiento especializado ocurre un estrechamiento del canal, presentarse una cicatrización e incluso edificarse la formación de hueso (calcificación). Muchos de estos cambios al ser irreversibles en ocasiones pueden requerir cirugía para corregir