¿Cómo actuar frente a una hemorragia en tu gato? – Minimiza los daños

‘Gatos’ una palabra que le trae muy buenos pensamientos a las personas cuando se menciona. Esto es debido a que estas mascotas son fáciles de criar, y resultan ser perfectos en lo que tiene que ver con la compañía.

Aunque estos animales son bastante tranquilos en comparación con otras mascotas, algunas veces quizás les ocurran accidentes que les produzcan hemorragias. En esta ocasión, te mostraremos qué hemorragias presentan los gatos, qué hacer y cómo saber si es grave. Cuando tu gato está en estas condiciones debes saber cómo cuidarlo.

¿Qué tipo de hemorragias se pueden producir en los gatos?

Hay variados tipos de hemorragias, algunas de estas son más graves o severas que otras. Por eso es que se tiene que conocer lo mejor que se pueda los tipos de hemorragias para de esta manera saber con exactitud si tu gato corre peligro al presentar una.

Hemorragia anal

La clase de hemorragias que más suelen presentar los gatos es la hemorragia anal. Tal clase de hemorragias se puede presentar por diversas cosas, estos son los motivos más comunes por los cuales se suelen ocasionar:

• Estreñimiento.
• Diarrea.
• Infección.
• Cáncer rectal.
• Parásitos.
• Envenenamiento.

Esas son las causas más comunes por las cuales los gatos suelen presentar hemorragia anal. En su mayoría este tipo de hemorragias no resulta ser graves. Las ocasiones en las que esta clase de hemorragia podría ser un grave problema es si se debe a envenenamiento o por cáncer de recto.

Hemorragia pulmonar

Las hemorragias pulmonares son de preocupación, ya que están relacionadas con una parte fundamental del cuerpo. Esta clase de hemorragias se pueden presentar por las siguientes razones:

• Contusiones.
• Golpes en la zona del pulmón.
• Traumatismo grave.

Las hemorragias pulmonares suelen ser causa de golpes o intoxicación más que por enfermedades. Cuando un gato tiene una hemorragia pulmonar, presenta los siguientes síntomas:

• Tose y al hacerlo expulsa sangre.
• Le cuesta bastante respirar.
• Sus membranas mucosas se tornan pálidas.

Hemorragia nasal

La tercera clase de hemorragias que pueden presentar los gatos es de carácter nasal. Entre las razones las frecuentes se encuentran las siguientes:

• Caídas de altura considerablemente alta.
• Traumatismos.
• Atropellamientos.
• Rinitis.
• Enfermadas crónicas.
• Peleas entre gatos.
• Pólipo nasofaríngeo.

¿De qué forma debes de proceder si tu gato tiene una hemorragia?

Cuando tu gato presenta hemorragias externas tú mismo puedes tratarlas. Tratar la hemorragia externa de un gato es tan fácil que solamente se tienen que emplear unos 4 pasos:

Comprimir la herida

Para comenzar, debes comprimir la herida. Esto se consigue limpiando la herida o hemorragia que tenga el felino y deteniendo el sangrado con una compresa. Cuando se aseguro la herida, hay que proceder al segundo paso el cual es ‘Vendar la herida’.

Vendar la herida

Para vendar la salida de esta herida, lo que tienes que hacer es comprar vendaje de uso farmacéutico y envolverlo justo por toda la herida. Usar vendas es la mejor manera de curar las heridas de tu gato. 

Torniquete si es necesario

El último proceso es necesario solamente algunas veces. Si ves que después de haberle colocado la venda a tu gato, la herida todavía sigue sangrando, necesitarás hacerle un torniquete para evitar que esa hemorragia siga sangrando. Para hacer un torniquete debes:

1. Coge una venda y pásala alrededor de la parte donde se encuentra la herida. No encima de la herida, sino un poco más arriba de esta.
2. Ahora, realiza un nudo y apriétalo lo suficiente, pero tampoco demasiado, ya que podrías lastimarlo.
3. Luego, con un palito, un bolígrafo u otra cosa, pasarás a meterlo por dentro del nudo y lo girarás hacia una dirección hasta que consigas la presión necesaria. Recuerda que los torniquetes son para algo momentáneo. Luego de esto, debes llevar a tu mascota al veterinario.

¿Qué puedes hacer si la hemorragia es de origen interno?

Cuando la hemorragia resulta ser interna, lo mejor que se puede hacer es llevar al gato hasta el veterinario. Allí él lo revisará y podrá determinar el origen de la hemorragia, y atenderlo rápidamente. Envuelve a tu gato en una toalla y llévalo a consulta urgentemente.

¿Qué le puede pasar a tu gato si tiene una hemorragia muy grave?

Siempre que se trata de una hemorragia grave, no hay nada mejor que llevar al gato al veterinario. Una hemorragia mayor puede poner en peligro su vida. Cuando es algo leve, puedes tratarlo tú mismo, pero si la sangre no se detiene o es una hemorragia interna lleva a tu gato al veterinario sin pensarlo.