¿Por qué mi gato ataca a mi perro? Consejos para evitarlo

Las mascotas son para muchos parte de sus familias, en especial cuando se trata de perros y gatos. Pero esto requiere de tener una responsabilidad sobre su alimentación, salud, entretenimiento y demás necesidades que requieran. Aunque si cuentas con un perro y un gato, sabes que muy poco probable se la lleven bien o sean amigos al inicio.

Por ello debes atenderlos de un mismo modo con el fin de no generar favoritismo ni polémicas entre estos. Si deseas saber por qué tus mascotas no son amigos o quieres que así lo sean, entonces sigue leyendo detenidamente.

¿Por qué mi gato ataca a mi perro?

Los gatos son un tipo de mascota impredecible, es decir, nunca se sabe cuál es la conducta que adoptará ya que esta es variante y cambiante; pero sí existen gatos amorosos o cariñosos, otros muy juguetones, algunos se crean en la soledad y abandono.

Otros suelen ser muy dinámicos y activos, en cambio hay varios que son totalmente perezosos, otros nerviosos o estresados que debes aprender cómo calmarlos y así por el estilo un sinfín de particularidades.

De igual forma en que se comportan en su vida cotidiana, así mismo logran hacerlo para socializar con otros animales; es decir, si arañan los muebles en casa, tendrán cómo defenderse en estos casos de ataque, así que evita que hagan esto. Por ejemplo, unos gatos resultan ser muy buenos para tener amigos y otros son la contraparte, es decir, son agresivos y no les gusta que nadie se les acerque.

Ahora, en el caso de que tengas un gato y un perro en casa, debes saber por qué no se llevan bien y hasta por qué el gato ataca al perro; nosotros te lo explicamos poco a poco de las posibles causales a este motivo.

• Puede tratarse de que tu gato se sienta amenazado por el perro o desprotegido de su amo.
• También existe el caso en que le des prioridad al perro y por ello el gato siente celos y ataca.
• Lo puede hacer como mecanismo de defensa propio o protección de su territorio.
• Se siente estresado o de mal humor y simplemente busca atacar.
• Tiene miedo de que el perro se lance y este lo hace primero para dominar al otro.

Mi gato no reconoce a mi perro – ¿Por qué?

Normalmente los gatos no reconocen a las mascotas que viven con ellos por algunas razones, puede tratarse de vejez o un problema directamente en relación a la vista; también por el olfato o cualquier otro elemento distintivo con los que se puedan diferenciar. Así que lo importante aquí resulta estimularlos para que reconozcan a su amigo canino a simple vista, sepan cuál es su olfato y así no lo ataquen de manera agresiva.

En caso de que no sea ninguna de estas causales el motivo por el cual tu gato no reconoce a tu perro, entonces tienen que ver con un tipo de enfermedad cognitiva o de capacidades mentales, como por ejemplo la demencia senil o el alzhéimer que debes saber distinguir y conocer su sintomatología; ambos hacen que se les olviden las cosas e incluso los rostros comunes de la casa, incluyendo a sus dueños.

Cómo hacer que mi gato acepte a mi perro

Muchas personas cuando tienen estas dos mascotas en casa, piensan que es muy difícil hacer que se reconozcan y acepten mutuamente. En este sentido, necesitas ubicar espacios en común para que se vayan adaptando el uno al otro, también puedes tener un espacio para crear un momento de diversión y entretenimiento con los dos a la vez.

Por otro lado, evita que la comida y caja de arena estén en el mismo lugar, para que se eviten peleas. Trata a ambos de la misma manera para que ninguno se sienta como favorito. Déjalos solos a los dos y buscarán la forma de jugar y entenderse, así se aceptarán.

Cómo presentar a un gato y a un perro

Algo muy útil puede ser el hecho de colocarlos en contacto poco a poco, brindando a cada uno el espacio necesario dentro de la casa y a su vez, creando momentos para que disfruten juntos, se conozcan y puedan ser buenos amigos. Si se trata de un gato adulto y ha sido enseñado a enfrentar a los perros es algo muy difícil; pero si por el contrario, es un perro mayor y también persigue a los gatos, allí habrán problemas.

Lo más sencillo es que te pongas a jugar con ambos y entretenerlos en un mismo lugar, también que se vayan adaptando a toda la casa y puedas ir cambiando su zona de confort.

Cómo hacer que un gato no le tenga miedo a un perro

Puedes enseñar a tu perro a que no ataque ni tenga mala conducta con tu gato, así que debes castigarlo y regañarlo cuando pase los límites o ni siquiera los cumpla. Una vez adiestrado el canino, lo demás será fácil de aplicar.

Pero si se trata de un gato pequeño y un perro mediano o grande, este primero tendrá temor con solo verlo; si esto sucede, debes demostrarle a tu gato que el perro es un amigo de confianza y con el cual también puede jugar. Otra técnica es darles de comer en un lugar juntos, así se van conociendo más y pierde el miedo por dicho animal.

Cómo hacer que un gato y un perro se lleven bien

La idea es que tengas dos mascotas que se lleven bien y no te causen problemas en casa; así que nosotros te enseñaremos qué debes ir haciendo para que se acostumbren y se hagan amigos.

• Ten mucho cuidado y precaución al principio, esto supone una vigilancia sobre el comportamiento de cada uno con el otro.
• Dales un espacio para que compartan y se adapten a sus olores.
• Haz que jueguen juntos mientras tu estás ahí presente.
• Prémialos por el buen comportamiento que tengan y que sea equitativo.
• Déjalos solos un tiempo sin tanta supervisión.
• Junta sus lugares poco a poco.
• Elimina la vigilancia a medida que observes una buena relación.

Cómo evitar que un gato ataque a los perros

Para evitar estos enfrentamientos, debes mantener una distancia entre ellos la mayor parte del tiempo posible. También puedes buscar la forma en que socialicen y  deberás buscar juegos apropiados para ambos; calmar y relajar al gato en casos de tensiones o estrés e incluso medicarlo si es necesario, para que disminuya su temperamento y esté tranquilo.

Prevenir ataques de gatos

A veces los gatos se comportan extrañamente intentando hacer daño tanto a sus dueños como demás miembros de la familia; así que para evitar este tipo de ataques haz que tu gato tenga un lugar fuera de su zona de confort o puede que sufra de estrés o cualquier otra enfermedad similar.

Por ello, busca la manera de entretenerlo: sacarlo a pasear, jugar con él y prepararle incluso su comida favorita para que esté feliz. En caso de que no logres cambio con ninguna estrategia, es necesario llamar al veterinario para pedirle su consejo sobre un tratamiento adecuado o llevar el gato hasta allí.