Mi gato se rasca mucho y no tiene pulgas ¿Por qué lo hace?

En el lenguaje médico se conoce el término prurito como un picor que se siente en el cuerpo y unas ganas excesivas de rascarse. Esta acción también se puede observar en las mascotas motivadas a que a ellos les afectan mucho más, tanto los parásitos, como otros animales más pequeños, generalmente invertebrados, tales como las pulgas, garrapatas y mosquitos, algunos de los cuales pueden transmitir enfermedades como la filariosis canina.

Si tu gato se rasca con mucha insistencia y has descartado la presencia de pulgas lo están afectando otro tipo de microorganismos que probablemente no puedas observes a simple vista.

¿Qué es el prurito en gatos?

El purito es la irritación de la piel que provoca la necesidad constante de rascarse, en el caso de los gatos esto puede ocurrir por diversas razones cómo alergias atópicas o alimentarias, hongos, pulgas o ácaros. Son diversas las patologías que puede presentar tu mascota, para determinar la causa exacta de porque sucede este síntoma es consultar a un veterinario para que pueda aplicar los exámenes clínicos correspondientes.

Mi gato se rasca mucho y no tiene nada ¿A qué se debe?

Si en algún momento observamos que nuestro gato se rasca y aparentemente no le sucede nada, es importante recordar que existen patologías donde no hay una evidencia física como lo puede ser una alergia alimentaria. Sin embargo, es el veterinario quién podrá diagnosticar si existe algún problema de salud en el felino.

Otra causa común puede ser el estrés, ya que los gatos pueden sobre acicalarse o rascarse para intentar relajarse. En este caso debes buscar las causas por la que tu gato se siente estresado y por último, siempre descartar alguna patología o enfermedad que pueda estar padeciendo.

Causas de porque se rasca mucho tu gato

Generalmente ocurre un picor en la piel cuando existe presencia de larvas de parásitos en la superficie de esta, como por ejemplo los anquilostomas (enfermedad de origen parasitario).

Tu gato al rascarse hace que las mismas penetren a su cuerpo lo que generará que posteriormente ingresen al torrente sanguíneo y se alojen en el órgano que mejor permita su desarrollo ya en la fase adulta se observan las consecuencias en la salud, cuando la enfermedad es más difícil de combatir.

Otro tipo de patología que pueden generar picor en tu gato son las alergias alimentarias, si eres de los que alimenta a tu mascota con los sobrantes de cada una de tus comidas, existe la probabilidad que tu gato sea alérgico a alguno de los componentes del alimento que le estás suministrando por lo que es necesario que evalúes su dieta y evitar darle las sobras de tu mesa.

Es recomendable darle de comer alimento balanceado para gatos, asegurándote que cumple con todas sus demandas nutricionales. Pero no solo las alergias alimentarias pueden generar comezón, también lo pueden hacer productos químicos o de limpieza con los cuales haya estado en contacto.

Tu gato puede estar sufriendo de acné felino una enfermedad que se manifiesta con puntos negros o lesiones de mayor gravedad producidas por un aumento en las secreciones realizadas por las glándulas sebáceas. Esta enfermedad generalmente se puede tratar con lavados antisépticos hechos bajo vigilancia veterinaria.

Una patología cutánea muy temida por ser contagiosa es la denominada tiña de los gatos o dermatofitosis la cual se genera por la presencia de un hongo en la epidermis, el pelo y/o las uñas, este hongo genera unas esporas denominadas dermatofitos que son los responsables de propagar la enfermedad. El tratamiento de la misma generalmente se hace con fármacos anti fúngicos debidamente recetados por tu veterinario.

¿Qué síntomas tiene un gato de naturaleza alérgica?

Es importante destacar que no es normal que tu gato se rasque en exceso, generalmente más que rascarse los gatos suelen lamerse mucho, lo que forma parte de sus hábitos higiénicos, si realiza esta actividad más de lo normal y comienzas a observar lesiones en el área esto puede ser síntoma de una afección del tipo cutáneo o puede deberse a la penetración de larvas de parásitos en el cuerpo.

Para que puedas tener un control adecuado y contribuyas al diagnóstico anota en una libreta la fecha en la que comenzaste a observar el prurito en tu mascota.

Es importante que trates de evitar de alguna manera que tu gato se rasque constantemente, ya que la fricción con la piel puede producir roturas y lesiones mucho más graves.

Así que, si observas a tu gato rascándose colócate unos guantes y revisa el área afectada en busca de rastros anormales, hinchazón, sarpullido, o la presencia de animales diminutos, si tu búsqueda ha arrojado resultados tómale una foto al área en cuestión y muéstrasela a tu veterinario cuando lleves a tu gato a consulta.

No se debe administrar ningún tipo de fármaco o preparados caseros si no ha sido recetado por un profesional capacitado que esté examinando a tu gato, generalmente los preparados caseros pueden agravar aún más el cuadro clínico de la mascota y a la larga resulta mucho más complicado su tratamiento y recuperación.

Así que si observas que tu gato se rasca insistentemente sin razón aparente acude con tu mascota a un profesional veterinario él evaluará la condición y te recetará el tratamiento adecuado para la afección de tu perro.

Remedios caseros para la picazón en gatos

Algunos remedios caseros que puedes utilizar para la picazón en tu gato son baños de avena, esto se deben preparar mezclando avena y agua en partes iguales hasta que se cree una masa que se esparcirá por el cuerpo del gato dando masaje suavemente para después retirarlo con agua. 

También puede realizar una pasta de bicarbonato de sodio y agua en partes iguales, la cual dejará reposar en el cuerpo del felino 5 minutos para después retirarla con abundante agua y por último un remedio casero muy popular es el vinagre de manzana que se mezclara con agua en partes iguales, luego esparcirlo por todo el cuerpo del felino y dejar actuar unos minutos para después retirarlo.

Debes tener en cuenta que estos remedios caseros solo funcionan para picazones leves y esporádicas, si tu mascota presenta un caso más grave de purito, sarpullido o heridas debes llevarlo inmediatamente un veterinario, ya que aplicar alguno de estos remedios caseros puede llegar a perjudicar o a infectar si hay alguna herida.